El eLEGS, un exoesqueleto artificial e inteligente, permitirá a los parapléjicos volver a levantarse, a sostenerse en pie e incluso a andar.
El aparato, desarrollado por la compañía estadounidense Berkeley Bionics, puede ajustarse en tan solo unos minutos a cualquier persona que mida entre 1,60 y 1,90 metros, y pese menos de 99 kilos.
Los movimientos se coordinan gracias a unos sensores y a un ordenador que permiten al sistema registrar los gestos de la persona, interpretarlos, y actuar en consecuencia. El dispositivo produce la flexión de las rodillas para que el usuario camine de manera natural.
Gracias a su estrecha cintura y su ajuste ceñido, el aparato puede manejarse fácilmente para hacerlo pasar a través de puertas y pasillos. Su peso gira alrededor de los 20 kilos, por lo que puede ser trasladado y transportado con facilidad.