Por estos días La Habana vive una gran fiesta cultural con motivo de la 32da. Feria Internacional del Libro, que tiene lugar en la capital de todos los cubanos desde el pasado día 15 y se extenderá hasta el venidero 25 de febrero, para luego tomar camino y llegar a todos los territorios del país
Tal como lo hace su bahía —abierta para recibir al navegante—, La Habana abre las puertas de la Fortaleza de San Carlos de La Cabaña para celebrar la 32da. Feria Internacional de Libro, que tiene lugar desde el pasado día 15 hasta el próximo 25 de febrero, con la motivación de conmemorar dos fechas históricas especiales: los 120 años del natalicio de Alejo Carpentier y los 150 años de la caída en combate de Carlos Manuel de Céspedes.
La Feria siempre tiene un protagonista principal: el libro, que al decir del gran escritor Jorge Luis Borges, «es una extensión de la imaginación y la memoria». Por ello, las actividades en torno al libro, tanto en soporte de papel como en digital, en franca convivencia, no se reducen a la venta de las novedades producidas por las numerosas editoriales cubanas y las extranjeras, porque este es un importante momento de encuentros en salas, jardines y las plazas adoquinadas del recinto sede.
En la Fortaleza de San Carlos de La Cabaña prevalece por estos días el acercamiento de los lectores con sus escritores, pero también se produce un fructífero encuentro entre los profesionales que trabajan de una manera u otra en la industria editorial; así que tienen lugar intercambios entre editores, traductores y promotores de cultura, y hasta un foro de negocios que nos hace pensar en futuras sinergias entre editoriales cubanas y extranjeras.
Por si fuera poco, se suman a la fiesta del libro otras artes: la música, la danza, las artes plásticas y la cinematografía participan de la Feria y despliegan por la ciudad el gran aliento cultural que después se extenderá por toda la Isla, y será en Santiago de Cuba el cierre el domingo 24 de marzo.
Esta edición de nuestra Feria del Libro de La Habana se dedica a dos relevantes intelectuales: la profesora e investigadora Isabel Monal, premio nacional de Ciencia Sociales y Humanísticas, y el narrador y ensayista Francisco López Sacha.
La elección de Sacha para ser homenajeado en el mayor evento cultural del país, junto con la Doctora Isabel Monal, nos lleva a recordar el lema que traspasa esta Feria del Libro: «Leer es construir identidad», porque fue él quien dijo en una oportunidad: «Ser cubano implica una voluntad, un acto de conciencia, y al mismo tiempo un acto de identificación con la historia de esta nación y su cultura».
Cada año la Feria se ha convertido, además, en el espacio ideal para la entrega de los premios nacionales anunciados en el mes de diciembre y de los concursos literarios que, cercanos a febrero, pertenecen al sistema del libro.
Y no podemos dejar de hablar del país invitado de honor esta vez: Brasil, ese inmenso país tan cercano al nuestro por múltiples razones y cualidades, que nos invadirá con una gran representación de sus escritores, exponentes de lo mejor de la literatura contemporánea, y que nos traerá también en avalancha 6 000 libros traducidos al español. La alegría será mayor cuando podamos ver las siete películas que se exhibirán y que vendrán con músicos para que la alegría sea completa.
Nos pudiera parecer entonces que escuchamos ahora los versos entrañables del gran Thiago de Mello: «... Y la alegría será una bandera generosa/para siempre enarbolada/ en el alma del pueblo».
La Feria es un evento cultural con variadas opciones para todos los gustos. Fotos: Abel Rojas Barallobre