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Una vez más, una adolescente sobreviviente de la masacre ocurrida en una escuela de Parkland, Florida, en febrero de 2018 se quitó la vida. Este fue el segundo suicidio en la misma semana de una alumna de esta misma preparatoria, atribuido a depresión postraumática provocada por un síndrome llamado «culpa del sobreviviente».
El 14 de febrero de 2018 un exestudiante de esa escuela de medio superior ingresó al plantel, armado con un fusil semiautomático, y asesinó a 14 estudiantes y tres empleados.
El domingo pasado, 17 de marzo, detalla Telesur, se suicidó Sidney Aiello, de 19 años de edad, quien estudiaba ya en la Universidad de Florida.
Según su madre, Cara Aiello la joven nunca pudo superar la depresión que sufría. Los padres publicaron su foto con la doble intención de recaudar fondos para su sepelio y hacer conciencia sobre el suicidio adolescente.
Victor Schwartz, director médico de la Fundación Jed que trabaja para prevenir el suicidio entre jóvenes de EE.UU., le dijo al canal NBC que «la exposición a la muerte a tu alrededor aumenta en cierto grado el riesgo de suicidio«.
«Es lógico que haya un aumento del peligro en relación con [el síndrome de] la culpa del sobreviviente».
