CARACAS, enero 14.— El presidente Nicolás Maduro calificó a 2018 como el año de resistencia y contraofensiva, y a este, de ofensiva económica integral del pueblo bolivariano, frase que podría resumir su informe de Memoria y Cuenta, este lunes, ante la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
«Todas las circunstancias vividas nos han hecho más fuertes para seguir avanzando», proclamó también Maduro, quien reconoció las cinco líneas estratégicas trazadas por Hugo Chávez como guía del Plan de la Patria para el nuevo mandato, que tendrá como propósitos puntuales hasta 2025, alcanzar para esa fecha los cinco millones de pensiones, el ciento por ciento de escolaridad de todas las mujeres en edad de estudiar, la atención integral a todas las embarazadas, integrar a otro millón de jóvenes al Plan Chamba Juvenil y la entrega para el plan juvenil Vuelta al Campo de 300 000 hectáreas, así como la construcción para la juventud de un millón de nuevas viviendas mediante la vía de autoconstrucción.
La creación de 8 000 comunas para expandir el poder comunal, que identificó como resumen de «todo el esfuerzo y el poder político y económico», también forma parte del Plan de la Patria 2018-2025 en el ámbito social.
«Eso (la comuna) hará irreversible la Revolución y demostrará lo que es una democracia revolucionaria», afirmó.
Llegar a 3 060 kilocalorías de consumo diario por persona es otro de los propósitos, así como la vacunación del ciento por ciento de los menores de un año, la reducción a menos del 54 por ciento de los bebés con bajo peso al nacer, un ciento por ciento de escolaridad de los venezolanos en edad de estudio, y tener cultivadas 5 016 hectáreas.
Sin embargo, la medida más trascendental pudiera estar en el ámbito económico, con la calorización de las empresas mixtas con capital extranjero, y la entrada de capital foráneo privado para «salvar» a muchas empresas nacionales, así como la producción de cinco millones de barriles de petróleo diarios.
«Personalmente asumo la conducción de la industria petrolera a partir de hoy para llevar estas metas adelante». «Pido el apoyo de la clase obrera petrolera, de los profesionales petroleros», anunció Maduro, quien también reiteró la convocatoria al empresariado privado local a acompañar esos esfuerzos.
Una de las primeras medidas a aplicarse entra en vigor este martes: el nuevo sistema monetario que al inicio de sus palabras había anunciado Maduro, al ubicarse la criptomoneda nacional, el Petro, a 36 000 bolívares, de modo que el salario medio estará en medio Petro: 18 000 bolívares.
Con el propósito de fortalecer de manera rápida la criptomoneda, el mandatario también pidió a las empresas estatales que vendan el 15 por ciento de su producción en Petro.
Además, solicitó a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) que acelere la emisión del decreto que facultará el pago de impuestos en razón de los grandes patrimonios.
Convencido de que el nuevo Plan de la Patria solo podrá lograrse en paz y estabilidad, Maduro formuló un nuevo llamado al diálogo a la dividida oposición venezolana, y repudió su intento de dar un golpe de Estado «con un barniz» de presunta constitucionalidad.
Como en su toma de posesión ante el Tribunal Supremo de Justicia, el Presidente llamó a la lucha contra la indolencia, el burocratismo y la corrupción, y dio a conocer que asume «la responsabilidad personal para enfrentar con coraje la corrupción y la dilapidación de la riqueza nacional en esas empresas públicas. Pido el apoyo de la clase obrera».
Al entregar el Plan de la Patria, programa de gobierno para los próximos seis años, Maduro solicitó que se le diera rango de ley, de modo de conferirle un «blindaje constitucional».
Al inicio de su alocución, el reelecto Presidente de Venezuela reconoció y agradeció la resistencia y el apoyo del pueblo ante todas las agresiones de que el país fue objeto en 2018. «Sin eso, no hubiera sido posible», dijo el mandatario, quien también reconoció a la unión cívico-militar existente en la nación.
«Nada ni nadie impedirá el camino del pueblo hacia la Patria nueva», aseguró.
La ceremonia se inició con la aprobación por la ANC del decreto de ratificación y reconocimiento de Nicolás Maduro como presidente, jefe de Estado y de Gobierno, y jefe de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana para el período 2019-2025, de acuerdo con el resultado electoral del 20 de mayo de 2018, tras comicios en los que obtuvo el 67 por ciento de los votos.
Constituyentistas, funcionarios gubernamentales, representantes de las organizaciones sociales y embajadores de más de 70 países participaron en la ceremonia.
En las calles, el pueblo ratificó con su presencia desde el Palacio de Miraflores hasta el Legislativo, su apoyo a la Revolución y a Maduro.