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Encuentro de la delegación de la Isla con miembros de la «Iniciativa-Cuba». Autor: Estudios Revolución Publicado: 13/11/2018 | 09:24 pm
LONDRES.— Muy temprano en la mañana de este martes, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, sostuvo un encuentro con miembros de la «Iniciativa-Cuba», programa nacido en 1995 para acrecentar las relaciones bilaterales entre Cuba y Reino Unido.
El intercambio, en el cual tomó parte la delegación que acompaña al Jefe de Estado de la Isla en su visita de tránsito por esta ciudad, fluyó de manera distendida, sobre una cuerda afectuosa, de entusiasmo y de respeto. Al frente de la entidad anfitriona se encontraba David Maxim Triesman, copresidente de la «Iniciativa-Cuba», quien dijo a Díaz-Canel que para él era un placer poder recibirlos a todos.
«Queremos ver un relanzamiento de la “Iniciativa-Cuba”, volver a inyectarle más energías», enfatizó Triesman, quien además comentó al Presidente cubano: «estoy comprometido al ciento por ciento en este propósito». Y en tal sentido compartió su deseo de organizar, de preparar muy bien un evento en la Isla que pudiera realizarse en 2019.
«Estoy encantado —confesó a Díaz-Canel— de que el presidente cubano haya podido hacer un poco de tiempo en su programa tan apretado para estar con nosotros en Londres». Y seguidamente expresó su confianza en que el mandatario reflejará en su política las posibilidades de acrecentar las buenas relaciones, de estrechar los lazos de amistad entre ambos países.
Sobre el mandatario del país caribeño, el copresidente de la «Iniciativa-Cuba», quien fuera ministro de Relaciones Exteriores de su país en los años 90 del siglo XX, comentó que ha ocupado responsabilidades en el Gobierno y en el Partido de Cuba. «Estoy seguro de que con este puesto tan importante que ocupa —dijo— con toda su experiencia, la que ha tenido y la que tiene, logrará alcanzar todo el éxito posible».
Por su parte, Díaz-Canel manifestó a los presentes: «Para nosotros es un placer estar hoy aquí en Londres, compartiendo con ustedes. Y de antemano quisiera agradecer la gentileza que ustedes han tenido de acudir a la convocatoria que se hizo para participar en esta reunión».
«Iniciativa-Cuba», expresó el mandatario de la Isla caribeña, «marcó el inicio de una relación distinta, más fuerte, más cercana, del empresariado y de sectores del mundo de la educación, la cultura y el deporte, con el Gobierno cubano, con sus instituciones. Por lo tanto tiene el mérito de que inició un camino para la colaboración y la cooperación y ha dejado un legado que nadie puede negar».
El Jefe de Estado de la República de Cuba quiso agradecer a los representantes de ese programa por la comprensión y por el esfuerzo desplegado, por haber estado todos estos años con Cuba y en Cuba.
«Creo que existen todas las bases y todas las posibilidades para que vayamos a una nueva etapa. Una etapa donde trabajemos con más intensidad (…)». Existen las bases, según comentó el mandatario, para concretar todos los propósitos; «en primer lugar, por el legado que ha dejado “Iniciativa-Cuba”; y en segundo lugar, porque nos conocemos».
El Presidente cubano reiteró a los presentes la voluntad del Gobierno de la Isla para seguir trabajando en el fortalecimiento de las relaciones económicas y comerciales entre ambos países.
En la Sede del Parlamento Británico
A poco de haber pasado el mediodía, el Jefe de Estado de la República de Cuba se dirigió al Parlamento de Westminster. Allí, la baronesa Ángela Smith de Basildone dio la bienvenida al mandatario, junto a Karen Lee, coordinadora del Grupo Multipartidista por Cuba en el Parlamento de Westminster.
Parte de la delegación cubana y líderes de ambas cámaras del parlamento británico participaron en ese encuentro, durante el cual Díaz-Canel correspondió al saludo de la Baronesa Smith y compartió reflexiones y emociones con parlamentarios británicos en Westminster.
A ellos Díaz-Canel les transmitió sentimientos de gratitud por todo cuanto hicieron durante la campaña por la liberación de los Cinco luchadores antiterroristas, injustamente prisioneros en Estados Unidos, y por la solidaridad con la Isla en su batalla contra el bloqueo.
Un segundo momento de la agenda del Presidente cubano en esos recintos fue el intercambio con parlamentarios de la Cámara de los Lores. Los diálogos versaron sobre temas culturales, deportivos y educacionales. Díaz-Canel propuso a sus anfitriones tender puentes entre Cuba y Reino Unido, los cuales sean de dos sentidos.
La certeza de que el bloqueo contra Cuba no podrá impedir este tipo de cercanías primó en las conversaciones en las que tampoco faltaron nuevas propuestas, nacidas de los parlamentarios, sobre futuras posibilidades de intercambio.
El siguiente momento del Presidente cubano en el Parlamento británico fue su encuentro con Jeremy Corbyn, líder del Partido Laborista. Ambos interlocutores examinaron las relaciones entre el Partido Comunista de Cuba y el Partido Laborista, y constataron el buen estado actual de las relaciones bilaterales entre Cuba y Reino Unido.
Con los Amigos de la Isla
En horas de la noche, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de la República de Cuba sostuvo un encuentro con integrantes de la Campaña de Solidaridad con Cuba y con representantes sindicales.
Allí, Díaz-Canel expresó que la visita de tránsito por Reino Unido se convirtió en una visita de trabajo donde ha existido la oportunidad para que la delegación cubana haya intercambiado con diversos sectores del país anfitrión. Cierre con broche de oro fue la imagen utilizada por el mandatario cubano para calificar ese encuentro con personas que han tenido gestos de solidaridad con la Isla.
Las relaciones entre ambos países —dijo el Presidente cubano— están bien; y recordó que las mismas se dinamizaron a partir de la presencia, en 2016, de Philip Hammond, hoy segunda figura del Gobierno británico y ministro de Hacienda, quien cuando visitó la Isla, siendo canciller, hizo posible que por primera vez alguien con esa responsabilidad en el Reino Unido arribara a la tierra caribeña.
Fue, recordó el mandatario, un punto de partida a partir del cual se incrementaron los intercambios de alto nivel y se acrecentó y dinamizó la presencia de empresarios británicos en Cuba.
Díaz-Canel señaló al bloqueo estadounidense como el principal freno en las relaciones comerciales y financieras entre la Isla y Reino Unido. Es esa una barrera que se ha recrudecido con el mandato de Trump, quien ha desmantelado, explicó el Presidente cubano, todo lo favorable que se había logrado con Barack Obama a pesar de las diferencias.
Trump se ha empeñado en desmantelar ese legado —afirmó el Jefe de Estado—; ha vuelto a usar el discurso de la Guerra Fría, la retórica de amenaza hacia Cuba. Y mencionó entonces el recrudecimiento del bloqueo, la limitación de viajes de los estadounidenses a la Isla, la reducción del personal diplomático en ambas partes, la complicación de los trámites migratorios y la aparición de nuevas medidas restrictivas contra Cuba.
Luego de hacer un recuento de la fructífera jornada de este miércoles, Díaz-Canel pidió a los amigos «algo que podemos cumplir entre todos: a pesar de las adversidades y de las presiones, entre todos, unidos, vamos a vencer esos obstáculos. Y de todos nosotros —enfatizó— saldrá lo mejor: la amistad, la solidaridad y la cooperación».
Como el desvelo por la Patria no languidece aunque uno se aleje físicamente por unos días, el mandatario explicó a los presentes algunos de los acontecimientos de trascendencia para la sociedad cubana actual. Uno de ellos es el proceso de reforma constitucional, sobre el cual Díaz-Canel ofreció detalles, como que la discusión popular del texto ha producido más de un millón 400 000 intervenciones, y más de 600 000 propuestas de modificación, añadiduras o supresiones.
En los próximos días, anunció, la Comisión responsabilizada con la elaboración de la nueva Carta Magna, la cual dirige el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, General de Ejército, Raúl Castro Ruz, tendrá varios momentos de trabajo para seguir perfeccionando lo ya existente.
El texto que vamos a llevar a referendo en febrero próximo será mucho más robusto, para apoyar así la Ley de Leyes de la Cuba que queremos, expresó el Presidente cubano.
El cierre el encuentro estuvo matizado por el entusiasmo, los saludos, la fotografía que todos los amigos solidarios pudieron hacerse con Díaz-Canel, y, definitivamente, por la tenacidad de quienes creen en el valor que hay en acompañar y defender las buenas causas.
