La Habana, en febrero de 2016, será la sede de la tercera reunión de la Comisión Bilateral Cuba-EE.UU., anunció Gustavo Machín, subdirector general de Estados Unidos en la Cancillería, quien aseguró que la segunda ronda realizada el martes 10 de noviembre en Washington «transcurrió en un clima constructivo, como ha sido el clima de las reuniones en las que hemos intercambiado».
Se examinaron los pasos que pueden dar resultados a corto plazo, como los vuelos regulares, el restablecimiento del correo postal directo entre Cuba y Estados Unidos, la protección del medio ambiente y el enfrentamiento al narcotráfico, aseguró el diplomático cubano en un encuentro con periodistas nacionales y de medios extranjeros acreditados en La Habana.
La Comisión, cuya creación fue anunciada el pasado 14 de agosto por el canciller Bruno Rodríguez y el secretario de Estado John Kerry, tuvo en esta ocasión el objetivo de revisar la agenda de temas acordada durante su primera reunión del 11 de septiembre, los resultados del intercambio hasta ahora, y asuntos complejos pendientes de solución.
Como tema prioritario en esos asuntos pendientes, la delegación cubana, presidida por Josefina Vidal Ferreiro, directora general de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores, insistió y presentó el bloqueo, cuya eliminación es esencial para poder definir que existe un proceso de normalización, apuntó Machín.
Al respecto puntualizó los otros temas vinculantes para esa normalización de las relaciones: la ocupación ilegal del territorio de Guantánamo donde está instalada la Base Naval, las transmisiones televisivas y radiales, también ilegales, hacia Cuba desde Estados Unidos, y los programas de desestabilización y subversión.
En un clima constructivo se revisaron los temas de la agenda de la Comisión y en cuanto a los vuelos regulares entre Cuba y EE.UU. dijo que se podría «llegar a un acuerdo que los facilite» en corto plazo, que definió en lapso de pocos meses, probablemente antes de la próxima reunión de febrero. «Es uno de los temas en que se ha avanzado más y estamos cerca de lograr un acuerdo».
Esos acuerdos que facilitarán los Gobiernos serán «concretos, tangibles», para comenzar los vuelos regulares, y su implementación corresponde a las líneas aéreas.
Subrayó Machín que en la reunión —que por la parte estadounidense estuvo presidida por Edward Alex Lee, subsecretario adjunto de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado—, otro de los puntos de interés y beneficio mutuos en el que pueden en corto plazo llegar a acuerdos «para profundizar o consolidar la cooperación bilateral» es el tema del narcotráfico.
Además comentó que se habían valorado positivamente las visitas de funcionarios de alto nivel y los encuentros técnicos de interés común como parte del proceso hacia la normalización de las relaciones, y mencionó al respecto la primera reunión del diálogo bilateral sobre la aplicación y cumplimiento de la ley, que tuvo lugar la víspera en Washington, con el objetivo de incrementar la cooperación en áreas de seguridad como son la seguridad marítima y portuaria, y se programaron otros diálogos en temas migratorios y trata de personas.
Mencionó también la expansión de la cooperación o asistencia a terceros en el ámbito de la salud, especialmente el enfrentamiento a epidemias y aludió a la reciente visita a Cuba de un enviado especial de Washington para los asuntos del cambio climático.
También acordaron continuar «el intercambio sobre bases de reciprocidad e igualdad sobre el tema de Derechos Humanos», señaló Gustavo Machín.
Ante las indagatorias de periodistas, el subdirector de Estados Unidos del Minrex reiteró que el tema bancario y de los créditos están entre los problemas medulares del bloqueo que no están resueltos y significó que hay compañías y bancos que temen a las sanciones y fuertes multas, por lo que se obstaculizan operaciones legítimas.
Añadió que no hay claridad en cuanto a cómo debe operar el uso del dólar en las transacciones comerciales de Cuba, lo cual es un problema a resolver de manera unilateral por Estados Unidos porque incluso afecta las medidas tomadas por el presidente Barack Obama.
En un comentario general sobre la posibilidad expuesta por uno de los periodistas de que se viera afectado el proceso entre ambos países por los resultados de las elecciones del próximo año en EE.UU., dijo que esperaba que el próximo presidente, sea quien sea, piense en el interés y beneficio del país. «Nosotros no estamos apurados, pero tampoco detenidos, estamos buscando una relación de beneficio mutuo a largo plazo».
Sobre la posibilidad de una visita del presidente Obama, el diplomático cubano reiteró que aunque hasta el momento no existe un planteamiento oficial al respecto, «si el presidente Obama quisiera viajar a Cuba será bienvenido como solemos recibir a los dignatarios extranjeros».