La profesionalidad del personal de la salud cubano ha sido clave en la mejora de la salud del pueblo venezolano Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:37 pm
CARACAS, Venezuela.— Más de tres millones de personas en el mundo, sobre todo de América Latina, han sido operadas gracias a la Misión Milagro, nacida el 8 de julio de 2004 de la mano de los Comandantes Fidel Castro y Hugo Chávez.
La venezolana Gabriela Soler, coordinadora nacional de ese programa que ha devuelto la visión gratuitamente a tantas personas, precisó a medios locales de prensa que esa cifra promete incrementarse con celeridad después de su reimpulso oficial, en junio de este año.
Soler apuntó que esta segunda fase comprende la creación de ópticas y talleres para tallar cristales o lentes, nuevos equipamientos para algunos de los centros quirúrgicos, un plan para continuar formando oftalmólogos y optometristas en Venezuela, la instauración de un centro estadístico para registrar las patologías de los ciudadanos atendidos y de los potenciales pacientes, entre otras medidas.
En este segundo momento se prevé, además, que 22 centros hospitalarios de la patria de Bolívar sirvan como sedes pilotos de la misión, la que también proyecta asistencia a la población de las penitenciarías, personas con discapacidad que todavía no han sido captadas y pobladores de regiones indígenas.
El programa social no solo incluye operaciones, también implica el suministro de lentes correctivos, pesquisas para incorporar a individuos con discapacidades visuales y un proyecto para evitar o prevenir enfermedades oftalmológicas.
Las afecciones más comunes tratadas por los profesionales de la salud en estos nueve años son: cataratas, pterigion, glaucoma y estrabismo.
En el acto de reimpulso de la misión, celebrado hace dos meses, Jorge Arreaza, vicepresidente ejecutivo de Venezuela, señaló que este proyecto sería rectorado aquí por Rosa Virginia Chávez, hija del Comandante Eterno, y que conllevaría brindar más atención a los pueblos de África sin disminuir las consultas a pacientes de los países del ALBA y América Latina en general.
En esa misma actividad el Vicepresidente ponderó la profesionalidad del personal de la salud cubano, que ha sido clave en esta misión, considerada una de las hijas predilectas de los Comandantes Fidel Castro y Hugo Chávez, según palabras del propio Arreaza.
La Misión Milagro, surgida en 2004 para el tratamiento de pacientes venezolanos en Cuba, tuvo una extensión a América Latina y al resto del planeta cuando en agosto de 2005 Fidel y Chávez firmaron el Compromiso Sandino para, entre otros aspectos, atender en ambos países, en diez años, a unos seis millones de personas —especialmente del Tercer Mundo— con diferentes problemas visuales.