El delegado guerrillero Marco León Calarcá reafirmó la necesidad de encontrar solución a los problemas del Catatumbo. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:37 pm
Cuando tras casi dos meses de protestas exigiendo se hagan valer sus derechos, los campesinos del Catatumbo colombiano comenzaron a desalojarlas carreteras, que en señal de protesta, mantenían bloqueadas, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) se preguntaron si eran necesarias las masacres, los muertos, las decenas de heridos y todos los traumas dejados en esa población para por fin sentarse a conversar.
¿El único recurso para que se le preste atención al justo reclamo popular es cuando recurre a estas vías?, cuestionó el guerrillero Marco León Calarcá antes de iniciar, este sábado, otra jornada de diálogo con el Gobierno colombiano.
Tras firmar un Acuerdo Social por el Catatumbo el viernes último, los campesinos regresan a sus hogares en un gesto de voluntad y con la expectativa de que esta vez las autoridades cumplan y logren llegar a acuerdos para paliar la grave crisis humanitaria en la zona.
Aunque, los agricultores poco a poco regresan a sus territorios a la espera de que sus líderes inicien el lunes próximo la mesa de negociaciones, han advertido que si el Estado vuelve a incumplir saldrán otra vez a las carreteras.
Según afirmó Calarcá, estas son las cuestiones que en la mesa de conversaciones buscan encontrarle una solución y, a través del debate, construir acuerdos «que no son sencillos, así como no es sencillo el conflicto en cuanto a su complejidad y tiempo».
El acuerdo de los campesinos del Catatumbo con el Gobierno, tuvo lugar en la ciudad de Tibú y en este estuvieron presentes el vicepresidente colombiano Angelino Garzón, quien encabezó la comisión encargada de lograr este preacuerdo, el ex presidente Ernesto Samper, el congresista Iván Cepeda, el vicefiscal José Perdomo y el presidente del Senado, Juan Fernando Cristo.
Cuando se reanuden las negociaciones en el Catatumbo, los manifestantes buscarán lograr acuerdos sobre cinco puntos mínimos irrenunciables: la creación de una zona de reserva campesina, el plan de desarrollo de la zona, subsidios para los afectados de la erradicación forzada de cultivos ilícitos y programa de sustitución gradual de estos, así como las garantías legales que aseguren que ningún manifestante sea encausado por las protestas.
En otro orden, Calarcá también insistió nuevamente en el pedido, constantemente reiterado por la organización guerrillera, para que se conceda la presencia en la mesa de diálogo del insurgente preso en Estados Unidos, Simón Trinidad.
Se hace necesario, apuntó el delegado guerrillero, hacer lo indispensable para que él pueda aportar luces a estos diálogos.
En un principio las FARC-EP hablaron sobre la posibilidad de que Trinidad, extraditado a EE.UU. desde 2004, participe a través de video conferencia o cualquier otra tecnología de avanzada.
Ahora esta posibilidad es muy limitada, dicen, porque rompe el compromiso de confidencialidad que tenemos en la mesa, sobre todo cuando el mundo ya tiene claros, los métodos de espionaje que usa Estados Unidos para acechar a cualquier ciudadano del mundo, recalcó.
Las FARC-EP han presentado fórmulas jurídicas pero estas necesitan de voluntad política para desarrollarlas. «Acceder a la presencia de Trinidad en la mesa, sería una oportunidad para que Washington demuestre en la práctica que está interesado en aportar a este proceso de paz», afirmó Calarcá.
Insistieron en la necesidad de que Simón Trinidad, guerrillero preso en Estados Unidos desde 2004, forme parte de la delegación de paz de La Habana.
Por qué no aprovechar todos estos espacios que se nos abren y hacemos Pedagogía de Paz ¿Por qué la mayor parte de la información se dirige a los temas de desacuerdo. Por qué no utilizamos un pequeño espacio para resaltar los temas de acuerdo?. Por ejemplo: la paz en un propósito nacional.
Convoquemos al pueblo y sus organizaciones, convoquemos a los ricos y sus gremios para poner en una balanza los intereses positivos de paz y para ir solucionando las cosas que en ese propósito nacional nos separan. Si nosotros logramos construir una base sólida de los puntos que nos acercan, seguramente vamos a tener mas posibilidades para resolver consultando los intereses de todos los puntos que nos diferencian.
Vaya nuestra voz de solidaridad con los trabajadores de la drumon que se han declarado en huelga de hambre exigiendo sus derechos. Nos preguntamos, ¿Serían necesarios cuatro muertos y decenas de heridos, todos los traumas que ocurrieron en 50 días de protestas de la población del Catatumbo para por fin sentarse a conversar?
Y entonces cómo se hace si la única forma de que le presten atención al justo reclamo popular es cuando recurre a estas vías. Estas son las cuestiones que en la mesa de conversaciones tenemos el firme deseo y propósito de encontrarle una solución a través del debate para construir unos acuerdos que no son sencillos, así como no es sencillo el conflicto en cuanto a su complejidad y su tiempo.