RIO DE JANEIRO, junio 21.— El venezolano Alí Rodríguez Araque, titular protémpore de Unasur, manifestó la preocupación del grupo por que se respete en Paraguay la democracia y el respeto a la legítima defensa, luego de que el Congreso de esa nación decidiera establecer un juicio político contra el presidente Fernando Lugo que podría llevar a su democión, al responsabilizarlo de un choque entre campesinos y uniformados que dejó al menos seis policías y 11 campesinos muertos el 15 de junio.
Lugo manifestó al pueblo que no renunciaría y que se sometería al juicio, aunque calificó la decisión legislativa como un intento golpista.
Nuestra misión va encaminada a buscar una salida a la situación planteada, respondió Araque, quien eludió dar conclusiones precipitadas a los periodistas que le interrogaron sobre las posibles acciones que tomaría la agrupación.
Cada país es soberano y cada institución toma decisiones de carácter soberano, dijo a una interrogante de los reporteros, y llamó a no precipitarse. Estamos en pleno proceso evaluativo de la situación. Pero si hay que reunirse con todos los sectores, lo haremos, abundó.
Han ocurrido ya situaciones de esta naturaleza en América Latina, rememoró Araque cuando se le recordaron otros intentos golpistas de este estilo en la región, pero no podemos emitir criterios concluyentes toda vez que el legislativo paraguayo aún discute. Sería precipitado hacerlo, aseveró.
En tanto, desde Washington, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, llamó a un diálogo para mantener «la paz interna» en Paraguay y que «se resguarde, en todo momento, el diálogo, el entendimiento y la paz interna en este país Miembro de la OEA», al tiempo que ofreció los buenos oficios de la organización continental en caso de que Asunción lo requiriera.
La víspera, precisamente, el presidente Lugo había anunciado la formación de un grupo especial de «civiles notables» con apoyo de la OEA para investigar los hechos acaecidos el 15 de junio.
El titular de la OEA expresó su confianza en que el proceso político en Paraguay «conduzca a un resultado que garantice la estabilidad y continuidad democrática».
Sin embargo, el deseo del legislativo de enjuiciar mañana mismo a Lugo deja ver una componenda política para sacarlo del poder, como estiman algunos observadores y fuerzas sociales y políticas que se movilizaron este jueves para apoyarlo.