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SIRTE, octubre 13.— Los opositores libios, que habían afirmado tener cercados a los últimos fieles a Muammar al-Gaddafi en dos barrios de esta ciudad, debieron ceder terreno bajo un nutrido fuego defensivo.
Previamente, los elementos armados del autoproclamado Consejo Nacional de Transición (CNT) habían anunciado que los gaddafistas se encontraban cercados en dos sectores al oeste de la norteña ciudad, específicamente en el Barrio Dollar y en el Barrio No. 2, al borde del Mediterráneo.
«Pensamos que aún necesitaremos tres días para capturarlos», reconoció Yahya al Moghasabi, uno de los comandantes del CNT.
Al cabo de cuatro semanas de bombardeos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que les limpia el camino a los opositores, y de intensos combates, Sirte se encuentra en ruinas, sin ningún edificio intacto y sus calles están llenas de vehículos calcinados, constataron AFP y AP.
El retroceso de los opositores en la ciudad meridional se produce luego de que el comandante que funge como jefe de las operaciones en el frente este de la urbe desmintiera la captura de Mutassim Billah Gaddafi, hijo del líder del país norteafricano, y quien fue comandante de una unidad militar que combatió en Brega. La falsa noticia había sido anunciada la víspera por el propio CNT.
Además de Sirte, las fuerzas del Consejo opositor seguían asediando el oasis de Bani Walid, otro bastión progubernamental, a 170 kilómetros al suroeste de Trípoli, que esperaban controlar luego de la caída de la ciudad natal de Gaddafi.
En este contexto, Amnistía Internacional denunció que los integrantes del CNT estaban cometiendo arrestos arbitrarios y perpetrando torturas contra leales a Gaddafi, soldados y supuestos mercenarios, dijo ANSA.
