WASHINGTON, agosto 24.— Estados Unidos se manifestó nuevamente «preocupado» por las capacidades militares de la República Islámica de Irán, con motivo de la reciente presentación del primer avión no tripulado de combate fabricado por ese país.
«Si (Irán) adquiere mayores capacidades militares será motivo de preocupación para Estados Unidos (…) y reaccionaremos adecuadamente, amenazó el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Philip Crowley.
No obstante, el funcionario reiteró que la mayor inquietud de Washington es la posibilidad de que Teherán construya bombas atómicas, lo cual ha sido negado en reiteradas ocasiones por Teherán al afirmar que su programa nuclear tiene fines pacíficos.
Mientras, desde la capital iraní, se supo del rechazo de ese país a las reiteradas peticiones de Occidente para que renuncie al enriquecimiento de uranio, luego de la inauguración de la planta de Bushehr.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores iraní, Ramin Mehmanparast, calificó de «sorprendente» una propuesta realizada por Alemania, al alegar el lunes que el suministro de barras de combustibles procedentes de Rusia para la central, muestra que el país no debe desarrollar más capacidades de enriquecimiento para tener energía nuclear con fines civiles, reportó DPA.
En contraposición, Mehmanparast exhortó a la participación de todos los países que deseen cooperar en el programa, indicó EFE.
El portavoz también reiteró la disposición de Irán a reanudar las conversaciones, tanto técnicas como políticas sobre el tema nuclear, con el grupo 5+1 (integrado por los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y Alemania), pero estos aún no responden para fijar lugar y fecha.
Para volver al diálogo, la República Islámica ha pedido a las potencias que clarifiquen su posición respecto al arsenal nuclear israelí y el rechazo de ese país a firmar el Tratado de No Proliferación Nuclear. El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, pidió también la implicación de Brasil y Turquía en las negociaciones.