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Ahmadineyad resultó ileso de una explosión accidental en la mayor refinería de petróleo de Irán. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 04:59 pm
TEHERÁN, junio 28.— El presidente de Irán, Mahmoud Ahmadineyad, afirmó este lunes que su gobierno mantiene la voluntad de hallar una solución al contencioso nuclear, pero pospuso para agosto una nueva ronda de negociaciones con el Grupo 5+1 (los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania), y bajo nuevas condiciones.
Irán acusó a Estados Unidos de llevar adelante una «guerra psicológica» con la difusión de noticias falsas sobre planes de Teherán para la fabricación de bombas atómicas. Según la Cancillería iraní, en declaraciones citadas por ANSA, Teherán continuará sus actividades nucleares pacíficas sin ser influenciado por las declaraciones del jefe de la CIA, Leon Panetta, quien dijo el domingo que la nación persa podría construir dos bombas atómicas en un plazo de dos años, al justificar un previsible ataque de Estados Unidos contra Irán.
Mahmoud Ahmadineyad cuestionó la hipócrita preocupación de las grandes potencias, pues «en el mundo están almacenadas unas 20 000 bombas atómicas» sin que Occidente haga algo al respecto, al tiempo que conminó a estos países a pronunciarse respecto al armamento atómico de Israel, y ratificó la posición de su gobierno a favor del desarme y la seguridad de los pueblos.
Tras preguntarse si esas potencias buscan ser amigas o enemigas de la República Islámica, Ahmadineyad defendió el derecho legítimo de Teherán a desarrollar la tecnología atómica con fines pacíficos, y exhortó a aquellas naciones a comprometerse con las normas del Tratado de No Proliferación, dijo PL.
Ahmadineyad también indicó que el acuerdo de Teherán con Turquía y Brasil seguirá siendo la base de las negociaciones para el intercambio nuclear y que no habrá cambios en el mismo. De acuerdo con el compromiso firmado por Irán y esos dos países en mayo, el país persa aceptó enviar 1 200 kilogramos de uranio enriquecido al 3,5 por ciento a Ankara a cambio de recibir en el plazo de un año 120 kilogramos de uranio enriquecido al 20 por ciento.
Se habían creado buenas condiciones de diálogo, pero ellos (el Grupo 5+1) quisieron tener una baza en las negociaciones y aprobaron una nueva resolución a tono con su práctica de mostrar el garrote, deploró el mandatario.
Mientras, Irán continuaba enfrentándose este lunes a la creciente presión económica desatada por las medidas aprobadas en su contra, luego de que dos firmas occidentales, la francesa Total y la española Repsol, detuvieran sus negocios con ese país, informó Reuters.
Las decisiones fueron anunciadas días después de que el Congreso estadounidense aprobara un proyecto de ley para castigar a las empresas que suministren gasolina a Irán, el quinto mayor exportador de crudo, que carece de la suficiente capacidad de refinamiento para sus propias necesidades de combustible.
