El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, recibió hoy en la Casa Blanca al Papa Benedicto XVI con quien abordará diversos temas.
Esta será la primera visita oficial de un Sumo Pontífice a la mansión Ejecutiva norteamericana.
Según un cable de PL, el presidente del Consejo Pontificio para la Justicia y la Paz, Raffaele Renato Martino, advirtió esta semana que la visita del Papa no puede ser interpretada como un apoyo a la política exterior de Washington.
La portavoz de la Oficina Oval, Dana Perino, reconoció que el Vaticano y Washington tienen desacuerdos por el conflicto en Iraq, aunque consideró que no se hablará mucho sobre ello, dice PL.
Otro cable de AFP asegura que el Papa pidió al presidente estadounidense George W. Bush usar «la diplomacia paciente para resolver los conflictos».
El cable de AFP dijo que Benedicto XVI adelantó en el vuelo que lo condujo a Washington que hablaría con Bush sobre la inmigración. Es necesario «hacer todo lo posible contra la precariedad y todas las violencias para que los inmigrantes puedan tener acceso a una vida digna», aseguró.
Los hispanos, que se convirtieron en uno de los principales pilares de la Iglesia Católica en Estados Unidos y que hoy suman casi 70 millones, pedirán al Papa que se pronuncie contra las medidas impuestas a los inmigrantes indocumentados.
Otro tema espinoso durante su gira serán los escándalos sexuales que involucran a numerosos sacerdotes, lo que obligó a la Iglesia Católica norteamericana a pagar dos mil millones de dólares de indemnizaciones.
Sobre ese tema, Benedicto XVI dijo sentir profunda vergüenza por los sacerdotes pedófilos y prometió mano dura con quienes incurran en ese delito, según cita PL.
Benedicto XVI llegó la víspera en visita pastoral a Estados Unidos y fue recibido en el aeropuerto por Bush. Es la primera vez que el mandatario tiene ese gesto ante un visitante en sus más de siete años de gobierno.
Como parte de su programa de seis días de actividades, el Papa asistirá a la sede de Naciones Unidas en Nueva York, donde pronunciará un discurso, y celebrará dos misas ante decenas de miles de personas.
El Sumo Pontífice también se reunirá con obispos norteamericanos y recorrerá la Zona 0, en Nueva York, donde estaban las Torres Gemelas y otros edificios destruidos en los atentados del 11 de septiembre de 2001.