Destruir la central nuclear de Bushehr, en el Golfo Pérsico, sería uno de los objetivos principales de una eventual agresión de EE.UU. al país persa. Teherán, agosto 4.— El ex presidente de Irán, Alí Akbar Hashemi Rafsanyani, afirmó el sábado que un ataque militar a su país supondría una especie de suicidio para Estados Unidos, reportó PL.
La República Islámica siempre demostró tener fuerza suficiente para enfrentar cualquier amenaza, y si nos atacan los agresores sufrirán graves pérdidas, peores que las de Iraq, Afganistán, Líbano y otros países, subrayó.
En declaraciones al canal televisivo árabe Al Arabiya, el ayatola iraní dijo tener la sensación de que los estadounidenses, los británicos y sus aliados, e incluso la OTAN, están impotentes y en un callejón sin salida en el país del Golfo Pérsico y en el propio Afganistán.
Al preguntársele sobre si la situación creada en esas dos naciones constituye un peligro para el Estado persa, respondió que desde el punto de vista psicológico e histórico las potencias en esas condiciones actúan de forma anormal y en varias direcciones.
Son muchas las dudas que hay de hasta dónde pueden llegar en sus propósitos, destacó. Lo peor que pudiera pasarles es que intenten salir de esos atolladeros mediante una nueva agresión, lo cual, dijo, consideramos un acto suicida.
Reconoció que esa acción desesperada traería problemas tanto a ellos como a los invasores, pero terminaría en una verdadera derrota para los agresores.
Lograr la estabilización e instaurar la seguridad en la región depende de que Estados Unidos quiera resolver de verdad los problemas y no intente imponer sus puntos de vista, consideró.