El último enfrentamiento entre Leones del Caribe y chapines sucedió en la Copa Oro de 2015. Autor: Getty Images Publicado: 24/03/2021 | 12:34 pm
Pocas horas faltan para el debut de la selección cubana en las eliminatorias mundialistas de Catar 2022 y ya todos comienzan a pensar en cómo irán los dos choques que disputarán los nuestros en Guatemala ante locales y curazaleños en el Estadio Nacional «Doroteo Guamuch Flores».
De cara al partido inicial ante los chapines, que se transmitirá hoy a las 8:00 p.m. por Tele Rebelde, el técnico Pablo Elier Sánchez, pieza fundamental en los cambios de los últimos tiempos, se ha visto forzado a cambiar sus planes debido a cuestiones climatológicas que han impedido la llegada de Maykel Reyes y Onel Hernández al país centroamericano.
Por el momento, lo más apremiante para la afición es saber cuál terminará siendo el esquema más práctico para ir creando una identidad clara. Lo más racional es pensar en un 4-3-3 que de amplitud al juego y permita explotar la velocidad, movilidad y el «toque» de Sander «Keko» Fernández, Dariel Morejón, Jean Carlos Rodríguez, así como de Onel, Maykel y Joel Apezteguía.
Ante la incertidumbre de cuándo llegarán los dos integrantes que faltan, es muy posible que la alternativa termine siendo una mancuerna en la medular, con par de interiores/volantes y dos puntas, uno más retrasado que el otro, todo siguiendo la filosofía de un 4-4-2 que sea capaz de adaptarse tácticamente si la situación así lo requiere.
El estadio nacional Doroteo Guamuch Flores tiene capacidad para 30 mil espectadores. Foto: Rodrigo Navarro (reportero local)
Mientras, en el mediocampo y la zaga habrá que ver qué sucede, pues si bien hay figuras de gran proyección, su inexperiencia y el poco roce que tienen entre ellos podría ser un freno para su rendimiento. Está claro que la presencia de Corrales, Piedra y Cavafe da más seguridad en una última línea en donde Sandro Cutiño debería ser el cuarto elemento.
Mientras, en la medular, Espino se prevé como el pivote alrededor del cual giren los «jugones» encargados de armar el juego ofensivo, o en cambio podría estar acompañado en el «doble cinco» por otro compañero que haga recorridos o bien se quede fijo, labor esta última que podría desempeñar el villaclareño Norgeman Rodríguez.
A la par de nuestros compatriotas, resulta que el combinado chapín también pasa por un proceso de transición generacional que se evidencia en una lista que tiene hasta 18 jugadores debutantes con la elástica nacional en este partido y sólo cinco con experiencia en estas lides.
Según nos refiere el colega guatemalteco Pedro Pablo Mijangos desde tierra centroamericana, los dirigidos por Marvin Amarini Villatoro son una selección con sangre nueva en torno a la cual no hay demasiadas expectativas actualmente en el país centroamericano.
Sus principales figuras son el veterano «enganche» José Manuel Contreras, integrante del Deportivo Comunicaciones; el arquero Nicolás Hagen, del Sabail azerí y el joven Antonio de Jesús López, miembro del prestigioso Club América de México.
Lo que más acusan ahora mismo guatemaltecos es la falta de un delantero contundente, posición que no ha sido cubierta con efectividad desde el retiro en 2016 de Carlos «El Pescadito» Ruiz, autor de 39 goles a lo largo de cinco eliminatorias. Por ello la estrategia debe ser la de apostar por un juego colectivo, para lo cual el míster Amarini Villatoro ha pedido a la federación tener a sus jugadores por al menos 12 días con tal de preparar los choques ante cubanos y curazaleños.
Visto lo visto, sería lógico no esperar un gran espectáculo a nivel de calidad futbolística, sino más bien un gran partido a nivel de entrega en donde ambos planteles querrán probar de qué están hechos y dejar en alto el nombre de su país.