Yordan (derecha) es un jugador clave en la selección cubana. Autor: Cortesía del entrevistado Publicado: 18/08/2018 | 09:02 pm
Mientras juega con el balón en sus pies, Yordan Santa Cruz lleva sobre sus hombros el peso de las emociones de todo un país. La ilusión de millones a cuestas es una carga aparentemente ligera para el naciente crack, quien regatea con elegancia y se burla de unos cuantos mexicanos desconcertados antes de detener la mirilla en el arco rival. Entonces todo se convierte en una ráfaga. Se prepara con descaro ante las narices de los defensores, busca un hueco entre el mar de piernas y, desde la lejanía de las afueras del área, le pega con potencia y marca el gol del evento.
En Cuba, aunque pasa la medianoche, casi nadie duerme. Esta vez el grito no lo provoca un gol de Cristiano, tampoco de Messi. Se grita el doble o el triple. Inédito. Si bien al final, con cierta dosis de injusticia, los aztecas se impusieron, el frenesí de aquel momento todavía es recordado entre la fanaticada de la selección nacional de la Isla. El propio Yordan, antes de los partidos, busca su móvil y reproduce el video con la jugada.
«Ese gol será inolvidable para mí. A cada rato me viene al pensamiento, incluso tener el video de ese momento en el teléfono me creó la rutina de verlo antes de cada partido o en tiempos libres, pues me sube el ánimo al instante, constituye una motivación y consigue sacarme cosas positivas», confiesa Santa Cruz.
Sus ojos se tornan cristalinos al reconocer lo que significó su jugada para la afición cubana. «Por eso precisamente representa tanto para mí, porque sé que le llegó al alma a los cubanos y es lo que más me enorgullece, que fue un gol importante no solo para mí, sino para todos los que lo celebraron esa noche», asegura emocionado.
Sobre su reciente experiencia en la Liga Dominicana, Yordan explica que «jugar profesionalmente constituye el sueño de todo futbolista cubano. Aprendí muchísimo, pues el nivel allí es superior al nuestro. Creo que saqué provecho al tiempo que estuve por allá».
—¿Será posible verte en una liga de mayor nivel?
—Yo soy una persona humilde y jamás abandonaría la autocrítica, pero sí considero que estoy preparado para jugar en una liga de más nivel, aunque todo en la vida va por escalones, hay que ir aprovechando cada oportunidad que se presenta en el camino. De cualquier forma, sí pienso que existe la posibilidad. Están sucediendo algunas cosas. No debo adelantar nada, sobre la mesa hay opciones en Panamá, Nicaragua, incluso México. Yo solo espero que se concrete alguna y ojalá todo salga bien.
—Formas parte de una generación dorada que, sin embargo, parece haberse estancado…
—Esa generación pensábamos que iba a ser por largo tiempo parte de la selección cubana y por diferentes motivos se fue desintegrando. De todas formas, todavía quedamos muchos que hoy por hoy integramos el equipo y nos esforzamos a diario por cambiar la cara del fútbol cubano.
—¿Qué te parece que se convoque a cubanos que juegan en ligas extranjeras? y ¿Cuán importante son para ustedes las contrataciones en otros lugares?
—Sobre las convocatorias, pienso que es algo que estaba necesitando el fútbol cubano, ese roce internacional que no tenemos y que nos puede aportar. Creo que es una medida positiva, el hecho de que nosotros también podamos salir, más allá de los topes amistosos que estamos efectuando últimamente ante países del área y que también tenemos que saber aprovechar si queremos obtener resultados superiores.
—¿Cómo cambiaron tu vida esos dos años de sanción?
—Como mismo dije que nunca olvidaré el gol en Veracruz, tampoco olvidaré ese período, porque el fútbol para mí era todo, estaba presente en cada minuto de mi vida y esa separación vino en el mejor momento de mi carrera. Pero aquí estoy de nuevo con mi selección, intentando aprovechar esta segunda oportunidad.
—¿Crees que es este el momento de cambiar el rostro del fútbol cubano?
—Tendremos bastante roce internacional y eso es importante, veo a muchos jugadores con elevado nivel técnico, también está la apertura en las convocatorias. Todos son aspectos positivos que nos ayudarán a los jugadores cubanos en el empeño de mejorar nuestra imagen.