Pese a caer frente a los brasileños, la escuadra sub-19 se clasificó a la ronda de octavos de final. Autor: FIVB Publicado: 21/09/2017 | 07:03 pm
El resultado de este lunes cosechado por la escuadra nacional sub-19 no pudo ser más contrastante. El disgusto por la mala nueva que anunciaba su derrota en cuatro sets ante Brasil (19-25, 25-20, 22-25, 19-25), se alivió en parte, luego de conocerse el pase de los muchachos a la próxima ronda del Campeonato Mundial de esa categoría, con sede en Bahréin.
Los antillanos lograron su boleto tras anclar en la cuarta posición del grupo B, todo gracias a la solitaria sonrisa obtenida en tie-break el pasado domingo ante los polacos —a la postre sotaneros del grupo.
Ahora, lo más seguro es que se enfrenten el próximo jueves 24 al elenco de Estados Unidos, que a falta de un partido, es líder de la llave A.
Mientras tanto, en la tierra de los faraones y las pirámides el plantel sub-23 cayó en un agotador partido de siete sets (15-13, 13-15, 15-11, 15-11, 11-15, 8-15, 12-15) frente a los brasileños, y enredó un poco sus posibilidades de avanzar hasta las semifinales del torneo.
Tensión aparte, a falta de un partido para concluir la fase clasificatoria, las posibilidades de los entrenados por Nicolás Vives se hallan todavía en los límites de lo posible. Empatados en victorias y derrotas (2-2) con su similar de Japón —segundos por mejor promedio de sets—, los cubanos solo deberán superar al representativo mexicano —incapaz hasta el momento de ganar un solo set— y esperar la caída de los nipones ante el líder Brasil.
Hipotéticamente, en la siguiente ronda les tocaría «chocar» con aquellos que finalicen como punteros de la llave B, puesto que transitoriamente ocupa Argentina, con Irán y Rusia a la zaga.
Por último, desde la provincia rioplatense de Santa Fe, las féminas del sub-18 todavía conservan las esperanzas, luego de las dos derrotas iniciales a manos de Alemania y Eslovenia.
La clave para el avance de las discípulas de Tomás Fernández es el partido que hoy al cierre disputaban contra Corea del Sur, a priori el equipo más débil de su llave, la A, pues el siguiente y último partido ante las locales punteras se presenta con un cariz diferente.