La villacareña Yaimé Pérez se perfila entre las principales cartas de triunfo para Cuba. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 21/09/2017 | 07:01 pm
Fue este 26 de mayo, en el habanero Estadio Panamericano, que logré acceder por primera vez a la discóbola santiaguera Yaimé Pérez. Venía caminando de la jaula de lanzamientos tranquilamente, sudando y con una toalla encima del hombro, luego de alcanzar en el Memorial Barrientos el título de su prueba con envío de 65,83 metros, que constituye el quinto mejor disparo logrado por ella en este 2017, que apunta a ser su año.
La indómita, coetánea mía, sostuvo un discurso lento y breve. Resumió en no más de 20 palabras cada respuesta que me ofreció, y sobre su plan de entrenamiento para el Campeonato Mundial de la disciplina, que comienza mañana en Londres, expresó ir poco a poco, sin violentar ningún paso, para poder incluirse nuevamente en la final, y una vez allí, superar el cuarto lugar de hace dos años en Beijing.
Hasta el penúltimo día de la lid londinense tendrá que esperar el pueblo cubano para ver el estreno de Yaimé, quien junto a la villaclareña Denia Caballero saldrá a buscar la marca clasificatoria para la discusión de medallas, a celebrarse en el cierre de la competencia, el domingo 13.
En el presente año la santiaguera ha intervenido en siete eventos, dos en Cuba y cinco en el exterior, y el balance de sus resultados ha sido de cinco diademas, un segundo puesto en la quinta parada de la Liga de Diamante en Oslo y un quinto escaño. Además, puede decir que venció par de veces a la favorita para imponerse en Londres, la croata Sandra Perkovic, durante el sexto segmento de la justa diamantina en Estocolmo y el 7 de julio en el mitin de Soteville, Francia, donde logró su mejor disparo de por vida, con 69,19 metros, que la ubica segunda en el ranking mundial, con el cuarto mejor envío de la temporada.
En ese listado, que exhibe a Perkovic como artífice de la tríada de lanzamientos más sobresalientes, Yaimé inscribió dos disparos más en el top ten, en el que está también Caballero, con su registro tope del año, 67,04 metros, alcanzados hace pocos días en Portugal y que la catapultó hasta el tercer escaño del listado universal.
Con solo un envío por debajo de los 65 metros, Pérez expresó que se ha centrado bastante en el aspecto sicológico, que le ha pasado factura más de una vez en competiciones internacionales de envergadura. «La falta de concentración y el descontrol que provoca la ansiedad me han golpeado a menudo en eventos, pero he realizado un trabajo serio en ese sentido con el sicólogo».