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Después de muchas horas de vuelo para trasladarse desde el Caribe hasta la capital de Japón, mañana las selecciones femeninas de voleibol de Cuba y República Dominicana, inauguran el Grand Prix (GP) mundial con su cuarto enfrentamiento en lo que va de año.
Con ventaja de tres por cero en los resultados, las cubanas bajo las órdenes de Antonio «Ñico» Perdomo aspiran a debutar por la puerta ancha, tal como se despidió en los recientes Juegos Panamericanos de Río de Janeiro.
En Tokio, sede del grupo A, chocarán a segunda hora en el propio coliseo Ariake, los equipos de Kazajastán y Japón, mientras en Verona, Italia, se verán las caras en la llave B los conjuntos de Brasil-Holanda y Taipei de China-Italia, en la sala Palaolimpia. La C, contempla los choques entre Rusia-China y Polonia-Estados Unidos, en la instalación Palaolimpia de la ciudad polaca de Rzeszow.
Llama la atención que las cubanas y las brasileñas no aparecen ubicadas juntas en ninguno de los poules eliminatorios, lo que quiere decir que solo se enfrentarían en la finalísima si se ubican entre las cinco primeras clasificadas, y de eso nadie tiene dudas.
Como dato novedoso, aparece el debut en estas lides del seleccionado de Kazajastán, contrario de Cuba el sábado. Luego de la decisión de Tailandia de no intervenir por ser sede Bangkok de las Universiadas, la FIVB la sustituyó por este elenco, también de la Confederación Asiática, debutante el año anterior en el Campeonato Mundial de Japón.
Tres de los 12 equipos participantes, representan a la zona NORCECA (Norte, Centroamérica y el Caribe), uno a la Sudamericana, cuatro a Europa y cuatro a Asia.
