Miguel Hanson y Diana Wesley, una pareja de fanáticos informáticos decidieron casarse, luego de haberse conocido en la red. A falta de un amigo para oficiar de ministro, optaron por crear un sofware. Ambos se sentaron a escribir y programar el código y en menos de lo que una novia ansiosa dice «sí, quiero», terminaron su invento. A la ceremonia asistieron unos 30 invitados, que fueron recibidos por la voz robótica de la computadora para luego ser testigos de cuando, desde la pantalla de un monitor de LCD, el reverendo Bit —nombre del programa— los declaró marido y mujer.