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Huberto Llamas. Autor: Juan Manuel Montoto Pascual Publicado: 11/08/2022 | 12:07 am
Durante los días 26, 27 y 28 del pasado mes de julio en homenaje al Día de la Rebeldía Nacional en Cuba, Santa Camila de La Habana Vieja, obra icónica del teatro cubano, del dramaturgo José Ramón Brene, regresó a la Plaza Vieja del Centro Histórico de La Habana, bajo la tutela del director de teatro, profesor y promotor cultural Huberto Llamas.
Juventud Rebelde conversó con el Maestro de las Américas, quien repondrá este sábado 13 de agosto, en la comunidad de La Güinera, de Arroyo Naranjo, la obra por el cumpleaños 96 del líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz.
El elenco estará integrado por actores de la Compañía Rita Montaner, de Teatro del Sol y de la radio y la televisión, acompañados por la agrupación Descendencia Rumbera.
—¿Por qué Huberto Llamas retoma Santa Camila de La Habana Vieja, en 2022?
—Procedente de México llego a Panamá y la Embajadora de Cuba en este país istmeño me pregunta: «¿A usted no le interesaría ir de nuevo a su Patria, donde dejó tantas semillas e hizo cosas maravillosas en la cultura, donde usted fue Héroe Nacional del Trabajo?». Claro que me gustaría, le digo. Se quedó callada, luego se comunicó con Gerardo, el de los Cinco Héroes, y se pusieron de acuerdo para que yo viniera a Cuba.
«Efectivamente al tercer día ella me llamó y me dijo que Gerardo Hernández se pondría en contacto conmigo para cumplir con mi sueño. ¿El sueño cuál es?, montar Santa Camila de La Habana Vieja, o algunas de las obras clásicas de la literatura cubana.
«Llegué a La Habana en julio 2021 y él me sugirió La Güinera, en un momento crítico, en el momento difícil.
«Estaba la comunidad como si un ciclón le hubiera pasado por encima, se hizo un escenario y montamos un espectáculo para recordar a Fidel en una cantata, lo hicimos con los vecinos de allí, donde conocí a una de las mujeres más comunicativas. Yo le puse “la tía”, pero ellos le dicen “la gran madre de todos los cubanos”. Es una mujer muy religiosa, con unas cualidades que hoy en día la tienen muy pocas personas, pero a ella se le sobra».
—¿Qué sensaciones le dejó armar de nuevo esta obra…, su sueño?
—La sensación más grande. A eso vine. Santa Camila… fue la obra con la que yo empecé, hace casi 32 años, en el Fondo Cubano de Bienes Culturales. Era un proyecto creado por la destacada teatróloga Bárbara Rivero —que en paz descanse—, esa grandiosa actriz Alina Rodríguez y un grupo de artistas jóvenes. Fue la primera versión de esta obra. Aquello fue un éxito tan grande, que dejó muchas cosas importantes, y yo quería retomarla ahora.
«Tuve la dicha de hacerla con todas las grandes actrices y actores del teatro y del cine cubanos. Con Daisy Granados y Luis Alberto García, con María de los Ángeles Santana y otras grandes estrellas que hoy, algunas ya no nos acompañan. Con Eloísa Álvarez Guedes, que siempre recordaré, con Adria Santana, Asenneh Rodríguez, Tito Junco, también Susana Pérez, Roberto Perdomo, Mijail Mulkay, Albertico Pujol, —que fue bestial—, Jacqueline Arenal, Aurora Basnuevo, Alina Sánchez».
—¿Es la primera vez que la presenta en La Güinera?
—No, en La Güinera también la hicimos en una construcción. Ahí fue Fidel a ver la obra. Los camerinos eran los almacenes de cemento y ladrillos, Fidel se divirtió mucho. Todo el trabajo salió fundamentalmente organizado y creado por Abel Prieto, que en aquel entonces era el presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), en coordinación con Nisia Agüero, que era la directora del Fondo de Bienes Culturales y a su vez promotora cultural. Abel llevaba la voz cantante de la dirección de este proyecto, era el que más entendía este proceso de investigación social, es un hombre muy culto y muy preparado.
«Ahora, después de tanto tiempo, muchas de estos grandes artistas ya no pueden hacerlo. Al igual que yo, no soy aquel joven, ahora soy un maestro, metido en el mundo de la docencia, imparto clases magistrales por toda América Latina, pero me he sentido muy feliz organizando esta Camila joven, esta Camila de nuevos valores, de los valores que van a renacer y que ya están vivos.
Ahora, en La Plaza Vieja ha sido todo un reto, porque, como decía, allí lo repusimos con toda una generación de grandes artistas».
—¿Qué significa para usted reponer de nuevo Santa Camila de La Habana Vieja el 13 de agosto, en La Güinera por el cumpleaños del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz?
—En La Güinera se me unen dos recuerdos grandes: el primero cuando estrené allí Santa Camila... y estuvo Fidel y el segundo el año pasado cuando me invitó Gerardo Hernández. Esta ocasión llega por el cumpleaños del Comandante en Jefe, líder indiscutible de la Revolución Cubana. ¡Qué honor!, que honor para mí ofrecerle a Fidel, que fue mi amigo, esta presentación exitosa y que ha dado un baño de alegría a los miembros de otras comunidades. Sé que ese día estará presente entre nosotros, porque nunca nos ha dejado de acompañar.
Fidel Castro en un encuentro con Huberto Llamas, junto a Nisia Agüero y Carlos «Tin» Cremata.Foto: Cortesía del entrevistado.
