En los últimos días, decenas de personas han llegado hasta el Palacio de la Revolución para acercarse a las pinturas del querido artista Ernesto Rancaño. Autor: Estudios Revolución Publicado: 02/03/2022 | 09:49 pm
Desde hace varias semanas las puertas del Palacio de la Revolución abren los sábados para que por primera vez los visitantes aprecien el arte y la belleza que atesoran los salones de la sede de la Presidencia y el Gobierno de la República.
En ese histórico lugar se pueden apreciar obras de talentosos creadores cubanos, unas situadas allí desde hace décadas y otras más recientes, como la exposición Al amparo del dador, del artista de la plástica Ernesto Rancaño, fallecido el pasado 25 de febrero.
Justo al concluir la escalinata de mármol que conduce al Palacio, en el salón donde se recibe a ilustres personalidades de todo el mundo que visitan el país, han sido colocadas en sus grandes paredes nueve pinturas del artista de talento y sensibilidad infinitos, que recrean la imagen y la espiritualidad del Maestro.
«He podido conocer bien de cerca ese Martí que tanto refleja Rancaño en sus pinturas, porque su obra ha estado muy vinculada a la figura del Apóstol y esta exhibición constituye ante todo un homenaje a él, quien lamentablemente falleció», dijo una joven profesora de la Universidad de La Habana, Brenda
González Peraza, luego de apreciar toda la muestra.
Y lo cierto es que hace cerca de un mes, el 28 de enero —aniversario 169 del natalicio de José Martí—, cuando quedó inaugurada esta exposición como parte de la 14ta. edición de la Bienal de La Habana, Rancaño recorrió esos pasillos junto al Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y otro prestigioso artista de la plástica, Alexis Leyva Machado (Kcho), quienes recibieron del propio autor una explicación de las obras.
Pero los que lleguen hasta el Palacio de la Revolución podrán acercarse a otras valiosas obras vistas hasta ahora solo en fotografías o por televisión, como el vitral El Sol de América, de Mario Gallardo Muñoz; dos extraordinarias esculturas de Eugenio Rodríguez; o el inmenso mural de cerámica vidriada de René Portocarrero, piezas escogidas por la delicadeza y el buen gusto de Celia Sánchez y ubicadas entre los bien cuidados helechos, evocación perenne de los tiempos de lucha guerrillera en la Sierra Maestra.
Las visitas a esta exposición, abierta hasta el 30 de abril, podrán programarse a través de los teléfonos, el correo electrónico o las redes sociales del Memorial José Martí, institución encargada de organizar cada recorrido de fin de semana.
«Pueden escribirnos a memorialjosemarti@gmail.com o llamarnos a los números 7 859 2902, 7 837 0194 y al 7 837 0180. Todos los sábados hay tres turnos: 10:00 a.m., 12:00 m. y 2:00 p.m. Cada grupo tiene 25 personas y hacemos una visita guiada que debe durar unos 45 minutos», precisó Javier Alejandro Sanzo Díaz, subdirector del Memorial José Martí.
El recorrido ofrece también un acercamiento a los orígenes de este majestuoso edificio construido en 1957 como Palacio de Justicia y donde, desde 1965, radica la Presidencia de la República, un lugar sagrado que atesora, junto a su belleza y cultura, gran parte de nuestra más reciente historia.