Personaje de la historieta Gugulandia, de Hernán H. « Cuando la furia de los placatanes imperaba sobre la faz de la tierra». Autor: Hernán H. Publicado: 24/02/2021 | 11:52 pm
Hoy se cumplen los primeros 52 años del suplemento de humor de Juventud Rebelde, nuestro dicloro difenil tricloroetano (dedeté), nombre de aquel famoso componente químico descubierto por el investigador suizo Paul Muller en el año 1939 y que tuvo fama como insecticida, hasta que afectó a los humanos.
Sacando cuentas, Juventud Rebelde contó con el humor gráfico desde el mismo día de su primera tirada, con aquella memorable caricatura de Virgilio Martínez anunciando la salida de este nuevo medio de comunicación. En noviembre, el segundo mes de vida de JR, específicamente el 15 de 1969, se funda EL Sable, hasta 1968 en que La Chicharra pasa a sustituirlo.
Celebramos hoy los 52 del dedeté, pero en realidad este diario de la juventud cubana abraza este arte periodístico desde hace 55 años. Cuántas secciones, textos, caricaturas y exposiciones se han realizado en este tiempo, es muy difícil de calcular. En la
hemeroteca de Juventud Rebelde se conservan colecciones de este fenómeno llamado dedeté, pero su digitalización es asunto pendiente y más cuando tanta importancia le dedica el país al rescate de la memoria histórica.
La diversidad de estilos gráficos y literarios fueron identificativos de la publicación, en la que pensamiento, más que la sonrisa fácil, ha sido un sello.
Muchas firmas nacionales e internacionales han publicado en estas páginas, mencionarlas a todas siempre crea el involuntario hecho de dejar alguna fuera, sin embargo, hoy queremos destacar la imprescindible tira Gugulandia, de Hernán H, la que supera en tiempo a nuestro aniversario y cuenta aún con una productiva actividad desde las redes sociales.
Hernán no quiso dejar pasar por alto nuestro aniversario y nos envió este texto:
—Ya venía yo publicando semanalmente mi página de Gugulandia en el periódico Revolución, cuando ese medio gráfico terminó y se dio inicio al nuevo periódico Juventud Rebelde y su suplemente humorístico El Sable.
A inicios de su inauguración me llamaron del nuevo suplemento: querían continuar con la publicación de mi Gugulandia. Eso me llenó
de una alegría que me duró por largos. Mi primera reunión fue con Marcos Behmaras, director del
suplemento; el escritor Agustín Urra; y el caricaturista Virgilio Martínez. Comencé a publicar mis gugus, y allí en ese ambiente de periódico, humorismo, diseño y arte de alta calidad gráfica e intelectual disfruté de un mundo muy especial de amigos y compañeros de trabajo que fue extraordinario y contribuyó en mucho a mi desarrollo personal y creativo. Las ideas, conceptos y buena conversación eran como alimento que nutría mi intelecto y dio muchos frutos que incrementaron mi creatividad, impulsada, además, por extraordinarios momentos como aquel cuando Félix Sautié, en su momento director de Juventud Rebelde, nos proporcionó los materiales para el desarrollo de las artes plásticas.
La publicación primero se llamó El Sable, más tarde LaChicharra; luego el DDT, que terminó como el dedeté.
Con el escritor Agustín Urra, que tiempo después pasó a ser director del suplemento, llegué a tener una gran amistad. Compañeros de gran talento con quienes compartí páginas fueron el Gallego Posada, Manuel, Aldo, Janer, Padrón, Torres y otros más.
Todos mis mejores recuerdos para aquellos sables, chicharras y dedetés, y para todos los que fueron parte de esos años de gloria compartida de papel, tinta e imaginación.
Un fuerte abrazo mío y de los gugus para todos los dedeteros que fueron y ya no están, para los que ahora siguen ahí y mañana seguirán.
Hernán H.