Espacio Abierto o cuatro razones para un taller literario (+ Video)

Las sillas vacías esperan. Es domingo, en la Casa de Cultura de Playa. En el patio lateral los asientos blancos están en círculo. El coordinador de Espacio Abierto espera a los Talleristas. Es poco antes de las cinco. Todavía faltan algunos minutos. La literatura fantástica y de ciencia ficción les invita a compartir sus creaciones, a observar con mirada crítica la producción del otro y así entre todos crecer.

Todo eso se nota casi de inmediato. Pura intuición, dirán algunos. Quizás por la forma de hablar de Abel Guelmes Roblejo, uno de los coordinadores del taller Espacio Abierto. Minutos antes de iniciar el ritual de leer y esperar la sentencia, él habló sobre el taller. Surgió en 2009 para apoyar la creación de obras de Ciencia Ficción y Fantasía, considerado un género menor en el panorama literario cubano.

Aprendizaje

La hora pactada se acerca y con ella los talleristas. Empiezan por un escritor que vive en otra provincia. Escuchan atentos. Empiezan los comentarios. Sigue otro autor. Así escucho a escritores que admiro, al profe Raúl Aguiar, a la estrella de rock, Yoss. Ellos leen y con humildad esperan los comentarios. Hay muchachos muy jóvenes, adolescentes, recién graduados, ganadores del Premio Calendario, amantes de la literatura y aspirantes a un puesto en la posteridad, que quizás inicie sentados en estas sillas blancas.

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Oportunidades

Un taller literario tiende a ser el primer ruedo del aspirante a escritor. La leyenda cuenta que, si no tienes talento suficiente, tu pequeña criatura saldrá destrozada. La leyenda también relata que si sabes escuchar quizás aprendas y evoluciones, y tu creación en vez de destruirse corregirá la trayectoria y llegará más lejos.

Al juicio del coordinador Carlos A. Duarte, este taller cumple una función casi educativa. «Soy uno de los fundadores del taller Espacio Abierto en marzo del 2009. Al inicio fuimos cinco coordinadores: Elaine Vilar Madruga, y Jeffrey López Dueñas, que vinieron a verme con la propuesta de crear el taller. Luego se nos unieron Eliette Lorenzo y Juan Pablo Noroña quienes provenían del extinto taller Espiral. Otros escritores que se incorporaron desde el inicio fueron Yoss, Raúl Aguiar, Gabriel Gil, Yadira y Denis Alvarez, Pavel Mustelier, Eric Flores, Alejandro Rojas, Leonardo Gala, Jesus Minsal, Carlos Muñoz y David Alfonso entre otros».

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Reivindicación del género

—¿Por qué fundar Espacio Abierto?

—Pensábamos que era necesario que existiera un taller literario especializado en la fantasía y ciencia ficción para ayudar a los jóvenes escritores (y a los no tan jóvenes) a desarrollarse más rápido como escritores.

Es una tradición que se remonta a los años 80 con el taller Oscar Hurtado. Además de este propósito pensamos que este taller podría servir como una herramienta para aglutinar a los escritores del género en Cuba y crear sinergia entre nosotros, facilitando la creación de nuevos proyectos.

—¿Qué impacto posee en su creación literaria?

—He aprendido mucho durante estos años en el taller y considero que esto ha tenido un impacto positivo en mi escritura. Esto se ha logrado tanto mediante la crítica de mis textos por los colegas, como por el hecho de tener que ejercer la crítica para ayudar a otros.

Mucha Ciencia Ficción y Fantasía

Yoss se acercó al taller en marzo-abril de 2009. Casi es un miembro fundador. Este escritor ya tenía experiencia en otros talleres literarios de Ciencia Ficción (Oscar Hurtado, de Plaza y dirigido por Daína Chaviano y el Julio Verne, de Playa). Si bien es un autor reconocido y publicado, considera que todavía no sabe todo sobre el proceso de creación narrativa.

Pertenecer a un taller es otra forma de humildad, de admitirse todavía un aprendiz a pesar de todos los premios y obras publicadas.

«Así que me gusta acudir a talleres, para someter mis obras a la opinión de otros, con lo que suelen salir mejoradas. Leer en voz alta es la prueba de fuego para cualquier prosa. También asistir a los talleres me permite ayudar, con mi experiencia y opiniones, a jóvenes que comienzan la larga marcha del escritor, así como otros me ayudaron a mí. Y, por último, como estudioso y teórico de la ciencia ficción y seleccionador habitual de cuentos para diferentes antologías, me permite “tomarle el pulso” al género. Conocer las voces nuevas, tener acceso privilegiado a materiales aún inéditos que podrían ser publicables, etc… ¡y casi se me olvidaba! También se hacen amigos y se alterna en un clima de comunidad de intereses, que vale mucho en la vida de hoy».

Una razón extra

La tarde del domingo, para mí, fue una de las mejores experiencias. Cada palabra de los talleristas sobre Espacio Abierto adquiere mayores significados cuando se les ve manejar la materia literaria, pulirla y convertirla en una narración mejor. Inclusive con su blog Korad publican artículos y cuentos relacionados con la Ciencia Ficción. Es una ganancia no solo para los escritores del taller, sino para toda la literatura de Ciencia Ficción y Fantasía.

«Sólo quisiera agregar que muchos de mis cuentos han mejorado de forma notable al ser pasados por el tamiz de la crítica colectiva en el taller. Que muy buenas ideas se me han ocurrido escuchando los cuentos de otros… y que casi la mitad de las antologías que he recopilado se han alimentado de cuentos que he escuchado en las sesiones de los talleres» reafirmó Yoss.

Es Espacio Abierto el lugar perfecto para quien lee, escribe, vive y sueña con la Ciencia Ficción y Fantasía. Es la oportunidad para crecer, participar en festivales y ganarse poco a poco un espacio en un oficio tan esquivo como la escritura creativa.

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