Rolando junto a su hijo Sian Chiong. Autor: Martha Vecino Ulloa Publicado: 21/09/2017 | 05:25 pm
Todo parecía indicar que el éxito de Al compás del son, le iba a asegurar a Rolando Chiong una mayor presencia en la pantalla doméstica, y sin embargo, los amantes de las telenovelas del patio han tenido que esperar casi una «eternidad» para que al fin volviera a estar detrás de las cámaras, ahora en la esperada Santa María del Porvenir, que estrenará su primer capítulo el próximo miércoles.
Por suerte, «el Chino» Chiong — como todos lo nombran— no permaneció inactivo en todo este tiempo. Ahí están algunos capítulos de Tras la huella y el telefilme Apuntadas, premio de la Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica en el Concurso Caracol de la Uneac de 2009, que le permitieron darle salida a su enorme talento.
Por ello son grandes las expectativas que ha generado Santa María..., cuyo original, a cargo de Gerardo Fernández (La botija, El naranjo del patio y Entre mamparas), le cayó en sus manos cuando se estaba sometiendo por cuestiones de salud a un tratamiento de radioterapia y quimioterapia. «Entonces, me sobrepuse y me metí en este proyecto real-maravilloso que se desarrolla en los años 50 del pasado siglo, en una imaginaria ciudad de Matanzas, cuya tranquilidad se ve perturbada cuando una noche comienza a caer dinero del cielo, que unos malhechores intentarán recuperar».
Con ese argumento, no extraña que el Chino Chiong clasifique a Santa María del Porvenir como «una telenovela con una fuerte dosis de costumbrismo; una tragicomedia sobre la cual revolotea un halo de farsa, que espero atraiga al público».
Seis meses de prefilmación exigió esta nueva propuesta de la TVC, para la cual se programaron tres de ensayo, a pesar de que esa no fue la realidad. «El guión no daba para los cien capítulos de 45 minutos que se habían acordado, explica. Entonces, decidí convocar a mi hermana Lucía para que lo adaptara».
Confiesa Lucía Chiong, quien aquí también interpreta a Rosmary, que continuar el guión resultó una empresa ardua. «No podía dejar a mi hermano solo y acepté. En este caso, fue necesario desarrollar las subtramas de los personajes secundarios —los principales estaban trazados de una manera muy sólida—, que al final son quienes adornan y aderezan la telenovela. Asimismo, nos vimos obligados a eliminar una historia y crear una nueva, lo que conllevó a que tuviéramos que reescribir los últimos diez capítulos, al estilo de Fuenteovejuna, y de paso nos dimos el gusto de hacerles guiños a clásicos de la literatura cubana como El cuentero, El hambre y Francisca y la muerte».
De Rosmary, Lucía adelanta: «Es la esposa del Jefe de la policía (Carlos Massola) y sin él no tiene razón de ser en esta historia, pero es un personaje muy agradecido, con la picaresca del cubano». Y junto a la Chiong, aparecen alrededor de 75 personajes que conforman la trama, entre los cuales destacan: Maykel Amelia Reyes (María Fernanda), Sheila Roche (Luisa), Erdwin Fernández (Julio), Félix Beatón (Coco), Daisy Quintana (María Efluvio Noriega), Zelma Morales (María Elisa), Teherán Aguilar (Pachiro), Max Álvarez (Mariano), Eslinda Núñez (María Paula), Patricio Wood (Tomás), Dania Splinter (Candita), Roberto Perdomo (Medina), Raúl Pomares (Vito), Cruz Pérez (María Lola)...
Menos mal que Rolando no es de esos directores que se empeñan demasiado en los castings, aunque esta vez tuvo que acudir a ellos para seleccionar a los niños, y a dos o tres personajes. «Lo que siempre ocurre es que, a medida que voy leyéndome el guión, comienzan a aparecer actores y actrices en mi mente. Cuando les digo que los he elegido, es porque creo que ya estoy firmemente convencido de que son los ideales».
Al igual que en otras ocasiones, el Chino acudió a parte de su artística familia, como dos de sus hijos: Rolandito y Sian, y también a sus colaboradores de siempre, como Beatón, Luis Carreres y Rubén Breña, quien tiene a su cargo uno de los roles de mayor peso: el Alcalde. «Como sucedía en esa época —nos da un avance el popular actor—, en mí se puede resumir toda la “maraña” de entonces. El Alcalde no posee escrúpulos, trata de escalar a cualquier precio, valiéndose de cuanto artilugio existe. Independientemente de lo que estaba escrito para él, está lleno de aristas, de manías, tics, lo que lo hacen complejo, pero que ofrecen muy buenas posibilidades para un actor».
Conocido por sus actuaciones en Historias de fuego, Añorado encuentro y Al compás del son, donde trabajó bajo las órdenes de su padre, Rolandito se convierte ahora en Virgilio, «un muchacho que se refugia en ese pueblo, huyendo de una tragedia, y es en Santa María del Porvenir donde encuentra el amor, la amistad. Es un rol que me ha gustado representar, aunque exigió mucho estudio de mí. De esos que mientras más te adentras en ellos, más te gustan».
Pero en Santa María... los televidentes encontrarán no pocos rostros que de seguro recordarán por mucho tiempo. Empezando por la bella Maykel Amelia Reyes, a quien tal vez ya pudieron descubrir en Aquí estamos, aunque llegó a la capital tras haber llevado adelante una importante labor en la radio, la televisión y el teatro de Granma y Holguín.
Cuando el Chino Chiong la vio en Cuando una mujer, pensó que ella podía tener grandes posibilidades de ser la María Fernanda, papel que le ofrece a Maykel Amelia Reyes su primer gran protagónico en la TV. «Es la concejal del pueblo, una persona justa, noble, que solo piensa en el bienestar de su gente y a quien no le interesa vivir de su cargo ni de la política».
Maykel Amelia reconoce que llegó a creer que la carga de trabajo sería insoportable. «Es que María Fernanda interactúa absolutamente con todos los personajes y aparece en casi todas las locaciones, además de tener una cantidad de texto impresionante. Además, el hecho de que el Chino, a quien admiraba desde hacía tiempo, depositara su total confianza en mí, hacía que mi responsabilidad y compromiso fueran superiores. Claro, la calidad humana de los actores, del equipo técnico y de apoyo, era tan grande, que uno se olvidaba de todo, de los problemas de producción que pudieran presentarse, del clima, y solo pensaba en el trabajo, en entregarse al máximo».
Santa María... presentará a muy jóvenes actores que consiguieron graduarse con las máximas calificaciones de la ENA y del ISA, gracias a su destacado desempeño en esta telenovela. En ese grupo se hallan: Yarelys Santana, Sian Chiong, Beatriz Dorta, Carlos Alberto y Yenisse Soria, que le dará vida a la Colibrí, y quien antes había trabajado en Adrenalina 360, mas aquí se viste de largo.
«Cuando los televidentes vean a la Colibrí no podrán imaginar la historia que se esconde detrás de esta mujer que se viste con austeridad», señala Yenisse, quien afirma que hasta último momento no estuvo segura de que el personaje fuera suyo.
«Éramos muchos los jóvenes que aspirábamos a estar en Santa María..., pero no teníamos demasiadas esperanzas, pues sabíamos que el elenco estaba integrado, sobre todo, por actores de más experiencia. No niego que me ponía muy nerviosa durante el rodaje, porque no quería fallarle al Chino, un director tan admirado por las nuevas generaciones», dice esta muchacha, que pronto podremos ver en Fotos, de Delso Aquino.
Santa María del Rosario, Mulgoba, Santiago de las Vegas y el Jardín Botánico Nacional, así como los estudios 19 y 17 del FOCSA, constituyeron las principales locaciones de esta producción donde se estrenó como codirectora Legna Pérez Cruzata, en tanto Michel Pascual Domínguez, como editor, descubrió otro mundo que comenzó a andar en documentales y cortometrajes.
Acabada de graduar del ISA, Legna tenía tantos deseos de colaborar con Chiong que comenzó como asistente de dirección, con tal de participar en Santa María... «No podía perderme esa oportunidad de conocer más de cerca todo este proceso», asegura, así que no le importó iniciarse con una prueba de fuego: atender vestuario y maquillaje en una telenovela de época, donde abundan personajes tipos, en momentos en que la situación económica del país es compleja.
«Sucedió que el codirector (Carlos Manuel Díaz) se enfermó y por la premura de salir al aire, hubo que adelantar la edición. Por esa razón, por pedido de Chiong, asumí esta responsabilidad, que ha constituido una escuela para mí».
También para el experimentado Tony Sánchez (El naranjo del patio, El medallón, El príncipe de los zorros, Los tres Villalobos), Santa María... representa su debut como director de fotografía de una telenovela. «Una obra de época exige atender el color, el vestuario..., y no resultó nada sencillo, en verdad fue casi traumático, pero todo funcionó.
«Por ello me siento satisfecho, porque la propuesta fotográfica es muy digna, aunque quedó por debajo de lo que hubiera querido. Creo que esta nueva propuesta de Chiong atrapará, otra vez, a los televidentes».