José Moreno de Alba, presidente de la Academia Mexicana de la Lengua. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:03 pm
Representantes de las 22 Academias de la Lengua Española aprobaron por unanimidad el texto definitivo de la nueva edición de la ortografía, cuyas reglas no imponen su uso, sino criterios uniformes de acentuación y diversas denominaciones, destaca PL.
En el acto, efectuado en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, José Moreno de Alba, presidente de la Academia Mexicana de la Lengua (AML), aseguró que la nueva regla presenta caracteres que la hacen más sólida, exhaustiva y moderna.
Según el académico se trata de la primera ortografía razonada del idioma español, en tanto explica temas importantes como el peso de la oralidad en la escritura, los orígenes de la escritura alfabética, las funciones de la ortografía, el origen y evolución de los sistemas ortográficos y su importancia social, entre otros.
Aclaró que la obra evita tecnicismos y expresiones de difícil comprensión, de manera que los hablantes alfabetizados de cualquier parte del mundo puedan escribir el idioma español con corrección y propiedad.
En esta nueva edición de la ortografía de la lengua española, las academias recomendaron que la Y se llame "ye" y no "i griega", y que los distintos nombres de la V se unifiquen en "uve", mientras que la B se nombre "be".
De igual forma, los especialistas tampoco prohibieron que el "solo" adverbial lleve tilde. "Estas propuestas no tienen importancia, pero marcan la tendencia", aseguró Moreno de Alba.
En relación con el alfabeto, acordaron que la CH y la LL dejen de ser letras del abecedario, pues aseguraron que se trata de dígrafos y no de letras, con lo que el alfabeto ahora se reduce a 27 sus caracteres.
Algunas medidas polémicas, que levantaron revuelo días antes de la FIL, se tomaron en cuenta en este acto, como es la supresión del acento en el caso del adverbio "solo" para expresar "solamente", y de los pronombres demostrativos "este", "ese" y "aquel".
«El nuevo tratado no supone complicar las cosas, sino exactamente todo lo contrario. La precisión de las reglas es la mejor manera de simplificar la ortografía, y esto es precisamente lo que pretende la obra, resolver las reglas que resultan de dudosa aplicación», aseguró el presidente de la AML.