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En la hermosa escuela primaria rural Salvador Olivares Duarte, donde estudian niños de la comunidad Mogote, Díaz-Canel recorrió varias áreas, cuya arquitectura es fruto de la colaboración internacional y fondos municipales y se conserva muy bien desde su inauguración en 2019. Foto: @PresidenciaCuba/X Autor: Presidencia Cuba Publicado: 28/05/2025 | 10:59 pm
SANTIAGO DE CUBA.— Con la visita este miércoles a los municipios de Julio Antonio Mella y Tercer Frente, el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, cerró el primer ciclo de recorridos por todos los territorios de esta provincia, como parte del sistema de trabajo de la Dirección del Partido que lo ha llevado ya, junto al miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central, Roberto Morales Ojeda, a casi todos los 168 municipios del país.
Tras liderar en la mañana el acto central por el aniversario 68 del Combate de El Uvero y sostener luego un fructífero intercambio con jóvenes santiagueros en esa localidad de las estribaciones de la Sierra Maestra, el Jefe de Estado se trasladó hacia Mella, acompañado, también, por las principales autoridades de la provincia y el municipio, donde sostuvo intercambios en centros económicos y sociales y con la población en general.
Inició la estancia por el Monumento Nacional Mangos de Baraguá, donde visitó la Sala de Interpretación, que a través de las nuevas tecnologías y modernos conceptos museísticos, muestra lo más real posible el ambiente en el que el Mayor General Antonio Maceo Grajales protagonizó la histórica Protesta de Baraguá.
La sala se expande por la vida y obra del Titán de Bronce. Se le considera como un importante aporte al conocimiento de nuestra historia por parte de las nuevas generaciones.
El Presidente dejó escrito en el libro de visitas: «Una vez más acudimos a este importante sitio histórico para aprovechar e incorporar a nuestra actitud y convicciones el legado del General Antonio.
«Magnífico el montaje de esta Sala de Interpretación sobre una de las más heroicas páginas de nuestra historia, la Protesta de Baraguá.
«Preservemos siempre la memoria histórica de la Patria.»
Avanzada la mañana, el mandatario llegó hasta el policlínico docente Bertha Seret Rodríguez, que atiende a los mas de 8 000 habitantes del Área de Salud Baraguá, donde elogió el buen estado de la edificación gracias al cuidado que permanentemente se le dispensa.
La doctora Neyvis López Clavel, directora del centro médico, informó sobre los índices de Salud en la comunidad, que incluyen cero muerte infantil y materna, aunque ahora están teniendo casos de bajo peso al nacer, por lo que se está brindando especial cuidado a las embarazadas con riesgo, que son ingresadas en el centro materno de la cabecera municipal.
El Presidente indagó sobre los diferentes servicios que aquí se prestan y cuya calidad fue confirmada por varias decenas de vecinos del barrio, que lo esperaban en las afueras del policlínico para conocerlo en persona y transmitirle apoyo y cariño.
El mandatario explicó a los mellenses sobre las características de estas visitas que desarrolla la Dirección del Partido, e informó sobre diferentes asuntos, como la situación con el sistema electroenergético, los medicamentos y la producción de alimentos.
Ponderó los resultados que se van obteniendo en el consejo popular, una comunidad en transformación donde se han resuelto, según conoció, viejos planteamientos, como los relacionados con servicios vitales y a los que se les han dado solución a pesar de las grandes dificultades de hoy.
Los vecinos comentaron a Díaz-Canel algunas de las tareas en que están enfrascados para paliar las limitaciones, como el programa de autoabastecimiento local. Fue precisamente ese asunto el que lo llevó hacia otro punto, el área de desarrollo agropecuario La Confianza.
«La batalla de la comida la tenemos que ganar ahora», afirmó el mandatario a trabajadores y directivos de la empresa agroindustrial municipal, convencido por lo que aquí se va logrando.
Como parte de una estrategia de autoabastecimiemto municipal mucho mayor, con sus polos productivos, en La Confianza, con más de 30 hectáreas de tierra en desarrollo, se trabaja con tracción animal y se han logrado sembrar los principales cultivos rústicos que
demanda ese programa, como yuca y boniato, según los percápitas de hectáreas por habitantes.
El Presidente indagó sobre los avances en la ganadería menor y llamó a que en el más breve tiempo posible en el municipio de Julio Antonio Mella se cubra tanto la demanda de productos agrícolas como la oferta de proteínas, apelando tanto a la carne de cerdo como la cunícola, la ovino-caprina e incluso la acuicultura.
En el Tercer Frente
La producción alimentaria también fue punto central en la visita de Miguel Díaz-Canel, en la tarde de este miércoles, al Tercer Frente. La finca El Turquino, de la jefatura del EJT de Santiago de Cuba, fue el primer punto del recorrido por estas montañas.
Desde hace un año y nueve meses, cuando fue establecida, la granja se dedica a la producción de carbón y leña, pero tras desbrozar de marabú las áreas, los combatientes del EJT las siembran con cultivos varios, como plátano, calabaza, quimbombó, frijol gandul...
Es una diversificación agrícola que corona una pequeña presa intramontana ideal para el desarrollo de la acuicultura, un aporte de proteínas al que se suma la cría de cerdos y de gallinas para engorde y puesta de huevos.
Solo con técnicas manuales, los resultados de los más de 20 jóvenes del EJT que laboran aquí, casi todos del territorio, se destinan a la población, incluido un punto de venta en la cabecera municipal.
En condiciones de vida puramente campesinas, los jóvenes soldados hoy perciben salarios bajos, pero con las cosechas que prevén para los últimos meses del año, la Jefatura del EJT estima salarios de entre 15 000 y 20 000 pesos mensuales como promedio.
Los jóvenes del EJT verán así un salto grande en sus ingresos, pero respaldados por su aporte a la sociedad; o sea, lo harán para bien suyo y para la población, demostrando una vez más, refería Díaz-Canel, que tener una estructura del EJT en un municipio es una fortaleza.
En la hermosa escuela rural para la enseñanza primaria Salvador Olivares Duarte, donde aprenden las niñas y niños de la comunidad Mogote, el Presidente recorrió las áreas y aulas de una institución que destaca por una funcional y elegante arquitectura, fruto de la colaboración internacional y fondos municipales, y que se conserva casi igual a cuando fue inaugurada en 2019.
Las niñas y niños presentaron al Jefe de Estado algunos de sus proyectos culturales, como un grupo de son montuno adiestrado por el instructor de arte de la escuela.
La primaria Salvador Olivares destaca, además, por un liderazgo a nivel nacional en la disciplina de hockey sobre césped, gracias al trabajo de una entrenadora del Inder que ha permitido que alumnos del centro alcancen primeros lugares en los Juegos Nacionales Escolares, e incluso tres jóvenes de Mogote se integran al equipo nacional juvenil de la disciplina.
Mogote, con algo más de 500 habitantes, forma parte del consejo popular Comecara, nombre en honor a una planta medicinal que abunda en estos lares.
Con algo más de 3 000 habitantes, en Comecara viven centenares de niños y niñas confiados en su futuro, como muchos de sus hermanos mayores que cursan estudios medios y superiores en politécnicos y universidades de Santiago de Cuba y el país.
Ya a la entrada del poblado cabecera de Tercer Frente, Díaz-Canel fue recibido por decenas de habitantes del municipio que se congregaron para saludarlo y mostrarle su apoyo.
El Presidente conversó por varios minutos con ellos, e hizo énfasis en informaciones sobre la recuperación del sistema electroenergético y la necesidad de un consumo racional de la energía, tanto en los hogares como en entidades estatales y no estatales que están incrementando su consumo.
En Tercer Frente, como en Comecara y Mogote, el Presidente cubano tuvo un vívido ejemplo de lo que significa la Revolución para lugares intrincados de la Sierra Maestra y otras zonas montañosas del país, antes perdidos en la miseria, la ignorancia y la desesperanza, y desde hace más de 60 años, comunidades que son fuente de plenitud y talento para la sociedad, por muy duros que estén siendo estos años.
