Tanto en el trabajo en comisiones como en plenaria, los jóvenes ratificaron su compromiso con devolverle la sonrisa y la dignidad a un pueblo hermano. Autor: Laura Mercedes Giraldez Collera Publicado: 25/12/2023 | 10:03 pm
CARACAS, Venezuela.— La picardía y la necesidad han hecho del cubano un ser social cuya inventiva le permite sobreponerse a situaciones tan sencillas como una fuga de agua, hasta salvar una vida. Así lo reconoce el licenciado en Rehabilitación Yoslandy Errasti Padrón, que desde la provincia de Pinar del Río llegó al lejano estado Delta Amacuro, en la nación morocha.
Él se ha sobrepuesto a las dificultades materiales provocadas por el bloqueo del Gobierno de Estados Unidos, a través de la innovación con las materias primas que tiene a mano. «La ozonoterapia es un tratamiento de países del primer mundo. Para su aplicación son necesarios implementos médicos especializados, que casi nunca tenemos al alcance. Sin embargo, ello no ha impedido que le brindemos este servicio al pueblo venezolano con la calidad que requiere».
En su Sala de Rehabilitación Integral en el Delta atienden a pacientes con úlceras del pie diabético, otitis y otras tantas patologías que requieren ese procedimiento terapéutico. «Hemos tenido que innovar para conseguirlo, pero no se ha detenido la atención», dijo durante el 4to. Activo Juvenil Nacional que por estos días celebraron las Misiones Sociales Cubanas en Venezuela.
Tras contar esa experiencia, propuso traer hasta esta nación los movimientos de jóvenes innovadores, ofrecerles la oportunidad de compartir las vías de solución a los problemas que día a día se presentan en su trabajo internacionalista. El bloqueo está presente desde que nos levantamos, incluso cuando dormimos, advirtió. No obstante, a través de estas pequeñas acciones podemos hacerle frente».
Su invitación fue una entre tantas que llegaron como parte de esta cita, que le da voz a los jóvenes de la Isla que tienen la valentía de tomar un avión y viajar hasta tierras desconocidas, con la responsabilidad de ofrecer una atención médica integral y de calidad.
«Este activo es un proceso que desarrollamos desde la base. En cada una de sus etapas se abordaron distintos temas, propuestos por los propios jóvenes. Para el encuentro nacional se llevaron a las comisiones tres temas fundamentales que engloban lo analizado en citas anteriores», explicó Miguel Guerra Guerra, activista nacional juvenil de las Misiones Sociales Cubanas en Venezuela.
«Los tópicos abordados fueron el bloqueo y el enfrentamiento de los jóvenes a esa política hostil impuesta al pueblo cubano, el trabajo en las redes sociales para la defensa de nuestras misiones sociales y, además, evaluamos los indicadores de salud de los venezolanos tras la llegada de nuestros especialistas», remarcó.
Guerra Guerra añadió que, independientemente de que en las Misiones Sociales existen espacios de diálogo y reuniones de brigada donde participan los jóvenes, no son momentos concebidos únicamente para ellos. «Por eso es que decidimos desarrollar los activos, que hoy constituyen el escenario fundamental en el que un joven de un estado conoce a otro ubicado en una región diferente. No es igual el quehacer de un profesional ubicado en la capital que el de uno del Delta Amacuro o Amazonas. Desde el punto de vista espiritual y cognoscitivo enriquece a nuestra tropa».
Los Quijotes de hoy
Arley Silva Velázquez, funcionario del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), quien acompañó a los participantes en el encuentro, hizo énfasis en la importancia de los intercambios referidos al «trabajo con la historia, a qué más hacer para mejorar los servicios que se brindan hoy al pueblo venezolano». Todo ello, resaltó, «indica la madurez con que se tratan las inquietudes juveniles en la misión, que en junio pasado recibió la Bandera de Honor que otorga la organización».
Precisamente la labor que realizan los cooperantes de la Mayor de las Antillas en esta tierra es blanco constante de ataque mediático. Al respecto, Franklin González Sarmiento, protesista en el Distrito Capital, subrayó que en un contexto en el que las redes sociales se emplean como parte de la maquinaria subversiva contra Cuba, «no hay mejor verdad para rebatir esas mentiras que la que creamos con nuestro trabajo. Nosotros llegamos tarde al internet, pero podemos emplearlo a nuestro favor. Para ello tenemos que entender su algoritmo y conocer nuestra historia», aseveró.
Los de menos edad, los que con esta tarea internacionalista apenas están iniciando su trayectoria laboral, se han convertido en protagonistas de las batallas actuales, en los nuevos héroes de América Latina. Se saben los quijotes de hoy. Así lo reconoce la doctora Dunia Remigio Díaz, del estado Mérida.
«Llegamos a un país donde tenemos que ocupar nuevas responsabilidades, distintas a las que desempeñábamos en Cuba. Hemos asumido la jefatura de Centros de Salud Integral y de estados sin antes haber tenido experiencia de dirección, casi recién graduados. Hemos sido maestros sin tener categoría docente, y como estos, podríamos mencionar muchos otros ejemplos de los momentos en que damos el paso al frente».
Añade que todas estas responsabilidades que ambos Gobiernos han puesto sobre nuestros hombros, es porque están seguros de la formación que tuvimos en nuestras escuelas. «Por eso, cuando estemos de regreso no podemos tener miedo a decir que sí, no podemos amilanarnos. Retornaremos a nuestras casas con la satisfacción de haber salvado vidas, de haber devuelto la sonrisa y la dignidad a un pueblo hermano, de ser mejores profesionales y mejores seres humanos».
Durante la plenaria del evento, Dagoberto Rodríguez Barrera, embajador de Cuba en Venezuela, hizo énfasis en que «el mundo vive, tal vez, el momento más complejo de la historia. El bloqueo ha sido reforzado por Estados Unidos en los últimos años a niveles sin precedentes. No ha habido otro momento en que las medidas hayan sido tan crueles y precisas, diseñadas quirúrgicamente para afectar nuestra vida diaria.
«No es porque le haya faltado maldad a las administraciones anteriores, sino porque las últimas han sido mucho más perversas», manifestó el diplomático, quien agregó que en medio de la crisis económica, ambiental, moral y ética que atraviesa hoy la humanidad, «debemos elevar la voz, desde este espacio, en defensa del pueblo palestino».
En esa convicción humanista se basa la vocación solidaria de Cuba, así trascendió en el encuentro, donde los jóvenes colaboradores tuvieron la oportunidad de seleccionar un delegado directo al 12mo. Congreso de la UJC, a celebrarse en abril próximo, una responsabilidad que recayó en la especialista en Medicina General Integral Leonela Esther Cañas Rivas, vicejefa integral en el Distrito Capital.
La galena, doble militante, con la certeza de que «ser médico cubano es, además de un desafío, una deuda con Fidel», aseguró «para mí como médico, como joven, como madre, como partidista, participar en la magna cita es un privilegio, un compromiso con nuestro país y con los jóvenes cubanos internacionalistas, que se enfrentan a las vicisitudes y dificultades que entraña esta labor de dar lo mejor de sí en otro suelo.
«La Revolución significa cambio, y a lo largo de nuestra historia, los jóvenes siempre han sido la punta de lanza de los cambios. Nos corresponde a nosotros cimentar esas bases y seguir adelante. El Congreso de la UJC será donde tratemos de hacer una Cuba mejor», aseguró.