Justin Bernet Autor: Claudia Alejandra Damiani Publicado: 13/05/2021 | 08:50 am
Su nombre es Justin Bernet. Tiene 26 años y es graduado de la Escuela Instructores de Arte, en la especialidad de Artes Plásticas. Habla de forma entrecortada. Es tímido, se excusa y nos cuenta de sus gustos: música pop-rock, leer ciencia ficción, dibujar historietas y ver el atardecer frente al mar.
Estos gustos pasaron inadvertidos para sus compañeros. Aquellas cualidades que lo hacían único, en cambio, no impedían recibir acoso escolar.
«Desde muy pequeño me sentía muy diferente, me gustaba hacer las cosas que hacen los niños. No me identificaba con nada femenino y siempre hacía todo lo contrario a lo que se me indicaba. La escuela fue uno de esos momentos que más sufrí. Se marca mucho la diferencia entre masculino y femenino y a mí no me gustaban para nada las cosas que tuvieran que ver con el género femenino».
Algunas historias dan muchas vueltas para llegar a un desenlace feliz.
Justin viajó a Colombia y allí, internet mediante, conoció a las personas trans y se entendió mejor a sí mismo. Al regresar a Cuba, descubrió la red Alma Azul, para hombres trans y sus familias. En ese colectivo se sintió acogido y acompañado. Le explicaron cómo funciona el proceso de hormonación en el país; Justin se integró de inmediato en el Cenesex (Centro de Educación Sexual) y empezó el tratamiento hormonal.
La comunidad trans, comenta, tiene muchos retos que debe superar. «Desde muy pequeñitos nos construyen desde los estereotipos, lo masculino para un lado y lo femenino para el otro. Ya está todo como enmarcado y cuando no estás de acuerdo con ese tipo de comportamiento, enseguida te ven como algo raro».
«Luego sería cómo llegar a la segunda casa: la escuela. Deberían darse este tipo de charlas y conferencias, obtener una asignatura referente a lo que es la sexualidad y género. Nosotros desde el activismo anhelamos construir una Cuba más inclusiva, una Cuba que genere espacios que no tengan ni discriminación ni odio por mí, ni transfobia y homofobia».
Justin lo resume todo en un anhelo. No es recibir un trato especial, sino que se respeten sus derechos como seres humanos.
Tan sencillo como el respeto a la identidad.
Este podcast fue realizado en colaboración con el proyecto feminista Cimarronas y cuenta con música interpretada por el Dúo Aguas de Marzo.