A la población le corresponde actuar con responsabilidad, dijo Peña García. Autor: Hugo García Publicado: 23/04/2021 | 03:24 pm
MATANZAS.— El propósito del país es llegar a la inmunización con los candidatos vacunales en toda la isla, pero hay que frenar la transmisión, afirmó aquí en conferencia de prensa la viceministra del Salud Pública (Minsap) Carilda Peña García.
Este rebrote es multicausal y a la población le corresponde actuar con responsabilidad, dijo Peña García, e insistió en que ante cualquier síntoma, por banal que sea, se debe acudir al médico, ya sea cefalea, fiebre, síntomas respiratorios, dolores de estómago, decaimiento o tos seca.
Muchas personas llegan tardíamente al sistema de salud, acuden al cuarto o quinto día del inicio de los síntomas y, por supuesto, si una persona demora en ser diagnosticada se retrasa también en ser tratada y aumenta la probabilidad de hacer formas graves de la enfermedad, manifestó a este diario la viceministra.
Las principales deficiencias apreciadas en Matanzas se deben a la baja percepción de enfermar y morir por esta enfermedad. «La población debe cubrir sus necesidades vitales, es real y lo sufrimos todos, pero si tengo que salir de la casa debo guardar el distanciamiento, usar el nasobuco doble, desinfectarme las manos con frecuencia… Esas cuestiones hemos comprobado en Matanzas que no están funcionando como debe ser», sostuvo la directiva del Minsap.
Otras insuficiencias tienen que ver con lo que no ha salido bien en el sector de Salud, como la no detención a tiempo de un grupo de enfermos, el diagnóstico no siempre oportuno y cuestiones operacionales, como la demora en el traslado de enfermos hacia centros de aislamiento.
Pero lo que más ha pesado es la demora entre el inicio de los síntomas y el acudir al médico para ser diagnosticado e iniciar el tratamiento, recalcó.
Exhortó a la población a quedarse en casa y criticó que haya muchos jóvenes reunidos en las calles, además de otras personas sin nasobuco.
La doctora Peña García subrayó a JR que la COVID-19 deja serias secuelas en los convalecientes: «Hay que entender que es una enfermedad nueva a la que nos estamos enfrentando y todavía la ciencia no tiene el conocimiento completo de toda la gama de secuelas y complicaciones que deja. Lo que sí está demostrado es que deja un grupo importante de secuelas en varios órganos, como el aparato respiratorio y cardiovascular. En el renal hemos visto también un número importante de afecciones y secuelas, algunas en menor grado, pero otras pueden llevar, sino se atienden correctamente, al deceso de las personas».
Añadió que todo paciente diagnosticad con la COVID-19, después de su recuperación tiene un seguimiento por los facultativos, y en dependencia de las afectaciones que ha sufrido se atiende de manera personalizada por los especialistas.
«La mayor transmisión y letalidad de la COVID-19 en Matanzas está asociada a la presencia de la cepa sudafricana, que circula en esta provincia», aseguró la experta.
Recalcó Peña García que el llamado es a no infectarse para evitar secuelas que todavía la ciencia no conoce. Marieta Poey Zamora, vicegobernadora de Matanzas, dijo que ya la provincia cuenta con diez centros de aislamiento para positivos, veintiocho para sospechosos y 53 para contactos de contactos, y se habilita una sala en el hospital provincial Faustino Pérez.
La vicegobernadora mencionó que se elaboró para los centros de aislamiento un reglamento que recibirá cada paciente: «En esos lugares hay que mantener una disciplina adecuada para evitar contagios», refirió al tiempo que señalaba como medidas el uso de doble nasobuco, eliminar las reuniones presenciales, no permitir niños ni ancianos en las calles; practicar deportes en las casas y regular el transporte intermunicipal y en las ciudades.
Por su parte, la doctora Ailuj Casanova Barreto, directora provincial de salud, especificó que ya se acumulan 209 012 pruebas de PCR realizadas en el moderno Laboratorio de Biología Molecular, el cual analiza más de 2 000 muestras diarias en los últimos quince días.
Desde el inicio de la pandemia se reportan 60 matanceros fallecidos, de ellos 36 en este mes de abril, que ha elevado la tasa de letalidad a 8,3 por cada 100 000 habitantes.