Restaurante Cuevas de Bellamar Autor: Hugo García Publicado: 18/07/2019 | 10:59 am
MATANZAS.— El cierre del restaurante Cuevas de Bellamar para una reparación capital causó entre la población gran desasosiego, pero su posible reapertura el próximo 26 de Julio ha creado igual sensación. Al recorrer dicha obra comprobamos que se trabaja con énfasis en la excelencia de la terminación de cada objeto de obra.
«Este sitio gana en confort y funcionalidad, porque a veces el cliente no percibe el deterioro, pero quienes laboramos aquí si sabemos dónde tenemos vulnerabilidades constructivas», precisa María de la Concepción Sánchez García, directora de ese centro.
«Cuando reabra queremos que muestre nuevos aires para que nuestros visitantes se sientan bien, disfruten de un buen trato y de la calidad de nuestra comida criolla, algo que estoy segura el pueblo lo va a recibir con júbilo», acotó Sánchez García, quien destacó que se aprecia un fuerte trabajo, disciplina y calidad en las terminaciones.
La cooperativa no agropecuaria Construcción, Andamios y Cofres (Sancof) y la empresa forestal de la provincia de Cienfuegos ejecutan los diversos objetos de obra. Según Sánchez García buscan «la cultura del detalle no solo constructivamente, sino también desde el uniforme que visten los dependientes, cómo se dirigen al cliente o cómo el cocinero presenta sus platos.
«Queremos marcar un sello y darle cumplimiento al esfuerzo del Gobierno y el Partido para que la población, cuando venga a esta instalación estatal, sienta regocijo, porque tenemos que rendirle culto a la empresa estatal socialista», recalca esta mujer que vela a pie de obra por el más mínimo detalle.
Se arreglan los accesos y se cambian los bancos, se embellecerá las áreas verdes, se reparan la cocina, los pasillos que dan acceso a los locales, las áreas de gastronomía, administrativas y el reservado, y la parrillada se reconstruyó nueva, el ranchón también totalmente con nueva madera y techo de guano; se amplían los baños sanitarios, y se colocan nuevos sistemas eléctricos, de agua potable y de drenaje.
Fotos: Hugo García