Los jóvenes recorrieron los 12 kilómetros entre el Bosque Martiano del Ariguanabo y San Pedro. Autor: Ismael Batista Publicado: 21/09/2017 | 05:39 pm
Hasta las distancias son relativas. Aunque el kilómetro sea unidad de medida exacta, y 12 kilómetros es siempre un trayecto considerable, no se cansa uno de la misma manera cuando los recorre en compañía de grandes. Porque ¿qué son los cinco jóvenes que han reeditado la II Expedición Ruta de Cuba por el camino de las Cien Ceibas?
El día 60 de la Ruta llegó. La impetuosa lluvia se sumó al recorrido, como casi siempre que grandes momentos se convierten en historia.
Pero aún empapados los caminantes, las calles que unen al Bosque Martiano del Ariguanabo, en San Antonio de los Baños, con el monumento al Titán de Bronce, en San Pedro, se llenaron de amor en los rostros de cientos de artemiseños que abandonaron cualquier prioridad para saludar a los marchistas.
Los que están a 19 días de completar una página joven, grande y única en la historia más reciente de Cuba, Liliana, Reynaldo, Alex, Luis Enrique y Jesús (el que se incorporó en Camagüey porque ¿cómo no iban a ser cinco?) fueron la admiración de los centenares de personas que se unieron a la marea de lucha y amor.
Salieron de Maisí y van para el Cabo. Son la juventud. Luchan por los Cinco y apoyan a Venezuela. Festejan el cumpleaños 160 de Martí. Así lo hicieron saber las consignas. Así lo demuestran con esta proeza de casi dos meses que realizan con el apoyo de toda Cuba, haciendo suya cada casa cercana a los caminos por donde los sorprende la noche, luego de recorrer decenas de kilómetros diariamente. Esta jornada, como lo había prometido, René González los acompañó en la caminata, honrado por convertirse en miembro de la expedición.
La Ceiba 82 ya fue sembrada en San Pedro, el sitio donde otro árbol, con bronce de igual fortaleza, plantó su estirpe para siempre. Aún quedan 18 posturas que regar o hacer nacer. El 7 de octubre se atenderá a la número cien en el extremo más occidental de la Isla. Los muchachos del Consejo de Jóvenes Plaza Martiana, de la Sociedad Cultural José Martí, continúan su recorrido de sacrificio y cultivo. Porque las distancias son relativas si de verdadero sentir se trata.