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Los caravanistas a su paso por Florida, en Camagüey. Autor: Jorge Camarero Leiva Publicado: 21/09/2017 | 05:37 pm
Lo que mucho se teme llega tarde o temprano, y este viernes la Campaña Admirable venció el tramo más difícil de su ruta: los 39 kilómetros de Carretera Central que unen la capital agramontina con el occidental municipio de Florida.
Para amenizar la trayectoria, la UJC y el Inder combinaron el paso de un ómnibus, un camión, dos motos y varias bicicletas, con las que establecimos un relevo simbólico en honor a Cinco cubanos que sueñan desandar un día estos espacios de su Isla para recuperar los años de injusto alejamiento.
Al núcleo del Comando se sumaron un holguinero y una camagüeyana, para un total de cinco mujeres y 13 hombres de entre 15 y 67 años. La escolta martiana fue asumida esta vez por estudiantes de la FEEM y dirigentes juveniles del municipio de Camagüey, encabezados por su primera secretaria Yesenia Pérez y el presidente de los pioneros Saúl Lazcano.
En territorio floridense el sol decidió dar una tregua a la humedad de estos días, y permitió a la tropa rendir tributo a José Martí en el parque que lleva su nombre, disfrutar de una exhibición canina, hacer ejercicios aeróbicos y organizar un tope futbolístico contra jóvenes de la localidad, ganado por el equipo de Admirables (tres goles a cero).
Lo que sí no amainó fue la lluvia de consignas a favor de la paz en Colombia y la unidad latinoamericana y caribeña, y mucho menos las preguntas y sugerencias sobre el proceso productivo y los esfuerzos por mejorar la eficiencia en tres entidades claves de este territorio: el hospital pediátrico Leopoldo Rey Sampayo, la fábrica de galletas Floridita y el central azucarero Argentina.
En este último la ingeniera cibernética Tania Jiménez cumplió su sueño de caminar sobre la mole de un ingenio, y la estudiante de Economía Eunice Bonsignore dijo sentirse «como en casa», y se tomó una foto junto a la imagen del Che Guevara, confesando que su casa en Rosario está a pocas cuadras del lugar en que naciera ese Quijote de América.
