CAMAGÜEY.— La apicultura de este provincia se apresta para alcanzar en lo que resta de año las 195 toneladas de miel, con calidad exportable, que faltan con vistas a vencer el programa de 380 toneladas, reportó la AIN.
Estamos en condiciones de llegar a esa cantidad, pues tenemos en explotación más de 11 200 colmenas, expresó Omelio Barba, director del establecimiento de la Empresa Apícola Nacional, en el territorio.
A pesar de las limitantes en la floración de las plantas en el semestre inicial, por la severidad y prolongación de la estación seca, Camagüey supera ligeramente hasta ahora la cifra planificada en ese renglón.
Con cotizaciones actuales superiores a los tres mil dólares la tonelada, según fuentes consultadas en Internet, Cuba comercializa en bidones su miel en Europa, fundamentalmente en Alemania, y trabaja por venderla en envases más pequeños, los que a la postre triplican el precio.
Guillermo Tejeda, especialista del establecimiento en Camagüey, recientemente dijo que en este momento se traen a sus sitios habituales en la Isla, desde cayos y áreas del litoral, unas cinco mil colmenas, tras aprovechar la floración de especies costeras cada año.
En los cuatro meses finales de 2011, en casi todas las provincias cubanas ocurre la mayor producción melífera, con la presencia de la floración de los bejucos y la campanilla, ricas en néctar.
Barba significó que en los últimos tiempos se consigue crecer en mil colmenas más cada año, y la cantidad actual no se reportaba desde inicios de la década del 90 del pasado siglo.
Camagüey cuenta con 126 apicultores, el 75 por ciento privados y los demás agrupados en cuatro Unidades Básicas de Producción Cooperativa. El pasado año la producción del compuesto quedó en 273 toneladas, registro a tono con las adversidades climáticas, severa sequía principalmente.
La miel es rica en sales minerales, hierro, fósforo, calcio y vitaminas, y posee cualidades antioxidantes y depurativas y energéticas, además de ser alimento que se digiere con facilidad y no irrita al sistema digestivo ni daña los riñones.
Cada año se comercializan en el mundo entre 300 mil y 400 mil toneladas, y los mayores productores son China, Argentina y México.