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NUEVA GERONA, Isla de la Juventud.— «La productividad del trabajo, el empleo, ahorro y la eficiencia son las principales direcciones en las que el movimiento obrero debe encaminar sus acciones», aseveró Salvador Valdés Mesa, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba durante el balance anual de esa organización en la Isla de la Juventud.
El dirigente sindical instó a ser objetivos en la discusión del plan económico y el presupuesto del año con los trabajadores, «porque en la comprensión de esa realidad está la percepción de su estabilidad laboral, sus ingresos, condiciones de trabajo y el bienestar de su familia».
«Ahí es donde el obrero se informa, orienta y evacua todas las dudas al tiempo que la administración y el sindicato lo comprometen con el cumplimiento de sus deberes laborales y con la disciplina», comentó.
El también miembro del Buró Político del Partido conoció en la reunión, a la que asistió la primera secretaria del Partido en el territorio, Ana Isa Delgado Jardines, que 11 empresas en la Isla de la Juventud presentan una deteriorada relación trabajo-producción-salario a causa de malas aplicaciones de los sistemas de pago por resultados y estimulación.
El informe agrega que aquí existen 308 sistemas de pago aprobados que benefician a unos 19 784 del total de los trabajadores (32 000), y llama la atención que solo el 20 por ciento de esa cifra está vinculado al destajo, hecho que no estimula el incremento de la productividad.
Lázaro Labrada González, secretario general del Comité Municipal de la CTC, reveló que entre las causas principales de esa realidad figuran la poca agilidad al aplicar los sistemas con efectividad, imposiciones, y la instrumentación de pagos por indicadores generales y específicos que benefician también a los que no producen.
