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SANTA CLARA.— La reapertura de escuelas de automovilismo en las que se sufraguen los gastos en moneda nacional resolverá un problema que data desde hace años, además de ser una forma de revalorizar el peso.
Se pretende que al menos exista uno de esos centros por provincia y un aula para la preparación teórica en materia de tránsito en cada municipio del país.
Esta medida facilitaría un mayor acceso de las personas para costearse el aprendizaje práctico que se ofrece en la actualidad solo en moneda convertible, en escuelas para ese fin del Ministerio de Transporte.
Ante la carencia de ese servicio en moneda no convertible, determinados particulares se dedican a enseñar a manejar con tarifas nada módicas, aunque sí por debajo de lo que cuesta en divisas, y los hay también que, valiéndose de sus relaciones, utilizan vehículos estatales.
La apertura de este tipo de escuelas resulta imprescindible para satisfacer una necesidad y, más trascendente todavía, una garantía, debido al rigor con que se impartiría el adiestramiento.
Vale, entonces, que la Dirección Nacional de Tránsito, consciente de esa realidad, incluyera en sus proyecciones de trabajo para este año, la de influir y apoyar la creación de escuelas de automovilismo en cada provincia en moneda nacional y un aula para la preparación teórica en cada municipio.
