La valentía y el patriotismo del pueblo de la República Federal Democrática de Etiopía, donde han brindado sus servicios más de cinco mil colaboradores cubanos fue destacado ayer, en la capital, durante el acto de conmemoración por el aniversario 30 de la misión militar de Cuba en ese país.
Según un reporte de la AIN, el general de división Leonardo Andollo Valdés, segundo Jefe del Estado Mayor General de las FAR, al resumir la remembranza dijo que más de tres mil etíopes se han graduado en la Isla, en tanto las relaciones de amistad y cooperación entre ambas naciones se fortalecen, cimentadas en los combates en defensa de la soberanía de ese hermano país, de 1977 a 1989.
Esa epopeya, también conocida como Operación Baraguá, a iniciativa del Comandante en Jefe Fidel Castro, contó con la encarnizada resistencia del valeroso pueblo etíope, de cientos de miles de cubanos y de otros países como la entonces Unión Soviética y la República de Yemen.
Destacó que en los feroces combates los militares etíopes y cubanos hicieron derroche de heroísmo, actuando en las más difíciles condiciones. Tanquistas y artilleros, subrayó, emularon en arrojo y temeridad asestándole potentes contragolpes al invasor somalí hasta alcanzar la victoria.
Andollo Valdés evocó con orgullo a los 163 combatientes cubanos que engrosaron la larga lista de los hijos de la patria de Martí que han muerto en otras tierras del mundo, durante la guerra y en los años que permaneció la Misión cubana en Etiopía.
Brehanu Dibaba Kuma, embajador de esa nación africana en La Habana, expresó que en el contexto de la celebración era preciso referirse a los hechos del 13 de Marzo y a los Cinco héroes cubanos injustamente prisioneros en cárceles del imperio y dispuestos a seguir luchando, pues ética y justicia son el sol del mundo moral.
Afirmó que el pueblo etíope agradece mucho al cubano, y en especial a Fidel, cuando en marzo de 1977 fue capaz de predecir los conflictos regionales que se avecinaban.
En este momento, Cuba amplía la colaboración médica, educativa, cultural y económica en Etiopía y de esta forma se fortalece el sentido de eterna retribución hacia los cubanos, quienes siempre han estado presentes en los momentos en que se les ha necesitado, aun cuando hayan tenido que enfrentar riesgos muy altos, acotó.
Sobran razones históricas y fortaleza moral para que el internacionalismo y las banderas de ambos países no caigan jamás, concluyó.
La presidencia del acto la integraron los miembros del Buró Político, general de cuerpo de ejército Julio Casas Regueiro, ministro de las FAR, y Esteban Lazo Hernández, además de Fernando Remírez de Estenoz, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su Departamento de Relaciones Internacionales.
También estuvieron presentes dirigentes del Partido, gobierno y jefes principales de las FAR y el cuerpo diplomático militar acreditado en Cuba. Como invitados especiales asistieron combatientes internacionalistas que cumplieron esa honrosa misión en Etiopía y familiares de los caídos.