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SANTA CLARA.— Los estilos de vida, como determinantes de la salud, desempeñan un papel fundamental en la esperanza de vida, según estudio realizado a 54 centenarios, entre los más de cien que viven en Villa Clara.
La mayoría de los encuestados, que mantenían un estado mental lúcido, se desempeñaron en zonas rurales en trabajos fuertes, en condiciones de vida de buena a regular, y más del 60 por ciento de ellos son hijos de padres que sobrepasaron los cien años.
El estudio, efectuado por la doctora Nancy Nepomuceno, precisa que el 95 por ciento de los ancianos tienen un hábito alimentario mixto, sobre la base de pescado, huevo, leche, carnes no rojas, vegetales y viandas hervidas. Además, utilizan en su elaboración poca sal y los sazonan con condimentos naturales.
Otras de las características descubiertas es que han llevado una vida muy metódica. Ninguno presentaba adicción a bebidas alcohólicas, aunque sí consumían mucho café y fumaban tabaco.
En un aparte con este diario durante la apertura del Taller Nacional de Geriatría y Trabajo Social en esta ciudad, Nancy Nepomuceno enfatizó además, citando al estudio, que los centenarios tienen intereses y motivaciones, incluso de tipo sexual.
El evento tiene el propósito de intercambiar experiencias en el tratamiento al adulto mayor, y sobre cómo lograr una mayor longevidad en Cuba, donde la expectativa de vida al nacer sobrepasa los 76 años.
En el país se logró que cada provincia tenga un programa de atención a los ancianos desde el punto de vista médico, sicológico y social. En este último aspecto desempeñan un rol principal los trabajadores sociales.
La provincia de Villa Clara posee la mayor esperanza de vida del país, al rebasar los 78 años de edad.
