La tecla del duende
Una mujer cumple 99 años este jueves, con el deseo de proseguir camino a su centenario sencilla, detallista, justa. La belleza en la obra revolucionaria tiene su santo y seña. La ternura de acompañar a tantos y tantos hijos heredados la llevó a ser madre, maestra de vida y artífice de construcciones humanas, o de la mano de hombres y mujeres.
De Celia se habla en presente, como se habla de los seres que físicamente no están, pero nos acompañan. Hasta el próximo año estaré recopilando ocurrencias para rendirle homenaje. Quisiera ascender al Turquino a encontrarme con ella, con Martí como enlace. También transitaré el Parque Lenin, visitaré su casa natal, recorreré la serranía y abrazaré a los pobladores, en un bombardeo de cariño. Y en la sencillez y belleza de toda obra, de nuestra obra, necesito, necesitamos los cubanos, que nunca se nos marche a otras tareas. Que esté con nosotros, siempre.
Celia, cien. Ya está lanzado el festejo. Dentro de un año, los que se sumen celebrarán por la Patria tu vida, madre también de todos los cubanos.
Los tecleros del Yayabo festejaron el Día de las Madres por adelantado, con regalos y muchas reflexiones para compartir. Ya se alista la fiesta para el 13er. aniversario, el sábado 6 de julio. Y al día siguiente, partiremos desde allí hasta Guaracabulla, que también festeja la fundación guillermiana. Como es lógico, el plural me incluye en ambas actividades. Espero no defraudar.
El sábado 11, a las dos de la tarde, la capital organiza su encuentro mensual en la Sociedad Cultural José Martí (17 y D). El tema: de madre...
Yula: Gracias por compartir la utopía, por el avance hacia los sueños y la certeza de nuestros pasos. El Garand de Juana.
Mamá: En la ruta de mi vida te seguí, te sigo; y el día en que no estés me seguirás tú a mí, porque el cordón umbilical es eterno. Cocó.
Cary, Nieves, Arminda, Katy, Annay, Nancy, Julia, Mignelys, Gilda, Cecilia, Claudia, Mileyda, Matilde...: Hay una postal que flota sobre un abrazo, hay un abrazo que llega desde nuestros besos, hay un beso que viaja sobre el aire, hay un aire que nos falta cuando queremos hablarles. Madres, amigas, tecleras, grandes mujeres, toda la alegría y el regocijo por ser nuestras, a tiempo completo. Tecleros de Cuba.