Las tres del domingo
Viene bien la parodia, pues al parecer es lo que sucedió en Portland City el pasado martes durante la celebración de elecciones en esa urbe estadounidense. Un ciudadano dejó bien resguardada en una bolsita de náilon su dentadura, pero se le olvidó. Ahora el centro de votación ubicado en el Auditorio Merill ha puesto el siguiente aviso: «Preséntese el dueño de los dientes postizos a recogerlos en la alcaldía».
El zoológico escocés Las cinco hermanas compartió una foto de un gato que quedó en una situación peligrosa cuando huyó de algunos fuegos artificiales y terminó en el recinto de los lobos del Ártico. Para su suerte, el inesperado visitante fue rescatado sano y salvo, aunque bastante estresado por los dos sustos recibidos en apenas instantes. Sin embargo, no se reporta que el minino haya perdido alguna de sus siete vidas…
Este era real y se ganó una página en el Guinness World Record. El empresario británico Richard Browning, fundador y piloto jefe de pruebas de Gravity Industries, impuso un nuevo récord de velocidad vestido con un traje de Iron Man de propulsión jet, en un espectáculo con el cual celebraba precisamente el Día del Récord Guinness en Lagoona Park, Inglaterra. Este Hombre de Hierro alcanzó una velocidad de 32,02 millas por hora en una distancia de 328 pies, y para enfriarle la calentura de la emoción el hombre cayó en el lago del parque. El inventor dijo que su traje se controla estrictamente a través de movimientos del cuerpo humano y puede poner en acción seis microturbinas de gas que llevan como combustible kerosene.
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