Frente al espejo
«Los niños son altamente perceptivos (Refrescando, Tecla del Duende, jueves 17 de julio). Sus ojos observan, sus oídos escuchan y sus mentes procesan los mensajes que absorben. Si ven que con paciencia proveemos un hogar feliz para todos los miembros de la familia, ellos imitarán esa actitud por el resto de sus vidas. Los padres y madres inteligentes se percatan que cada día colocan los bloques con los que construyen el futuro de su hijo. Seamos instructores sabios y modelos a seguir». (Rafael)
«Los tiempos y las condiciones van cambiando (Para explorar sin Dora, Glenda Boza Ibarra, 8 de junio). De eso no hay dudas. En mi infancia, tan lejana ya, sin la tele, con poco cine, con una escasez de juguetes que hoy traumatizaría a cualquier infante aficionado a todo lo moderno y ajeno, tan solo con el radio y la imaginación, no éramos menos felices.
«En horas extraescolares nos reuníamos los muchachos del barrio —o del caserío, en mi muy especial caso— y nos divertíamos muchísimo con juegos tradicionales, y hasta inventados por nosotros mismos, de los que ya hace rato pasaron al baúl de los recuerdos (...) Esos fueron tiempos que difícilmente volverán y que las nuevas generaciones se han estado perdiendo, tanto o más de lo que nos lamentamos muchos mayores por no haber tenido en nuestros tiempos la suerte de haber conocido Ataris, Nintendos, televisión en colores y tantas y tantas de todas esas cosas que hoy mueven al mundo». (Arístides Lima Castillo)