Acuse de recibo
Teresa Fiallo González (calle 82, No. 10305, entre 103 y 103 A, Güira de Melena, Artemisa) contó aquí el pasado 11 de octubre que es una jubilada de 62 años, vive sola y no tiene hijos. Padece una enfermedad respiratoria crónica y tuvo un paro en 2004, que le dejó secuelas irreversibles. Su pensión de 320 CUP, decía, apenas le alcanzaba para cubrir las necesidades más elementales. Depende de medicamentos, algo costosos, de por vida; y a ello se suman los gastos de electricidad, agua y teléfono.
Por ello, añadía, su economía era insuficiente para reparar la casa, que se deteriora: cubierta de tejas y madera en pésimas condiciones, llena de comején esa madera, que se ha diseminado por toda la casa. Filtraciones, con agravamientos en cocina y baño, casi a punto de derrumbe. Paredes reventadas, con humedad. Meseta con filtraciones en su totalidad. Baño con problemas de tuberías y desagüe.
Solicitaba subsidio para reparar desde enero de 2017, decía. Recibía visitas de las direcciones de la Vivienda y de Trabajo, y de Trabajadores Sociales. Pero seguía en una especie de lista de espera. «Cada vez que realizan un otorgamiento, acotaba, me dicen que mi caso fue analizado, pero quedé pendiente para el próximo, al alegarme la existencia de casos ¿más críticos?, en lo que no estoy totalmente de acuerdo. Y así llevo casi cuatro años».
Tuvo despachos con el Intendente municipal y el Director de Infraestructura de la Vivienda. Accedió a la Presidenta de la Oficina Auxiliar de la Asamblea Municipal del Poder Popular, y a la Primera Secretaria del Partido en funciones hasta el 10 de julio pasado. A fines de 2019, tras varias llamadas a la Primera Secretaria planteándole su preocupación por la demora en atenderse su problema, esta propuso de conjunto con el Intendente y la Presidenta de la Oficina Auxiliar de la Asamblea Municipal, solucionar el caso mediante el Plan de la Economía para 2020. Y después se reparó en que a Teresa no le sería posible con sus bajos ingresos efectuar los pagos mensuales que ello genera. Entonces decidieron que en el próximo otorgamiento de subsidios le darían solución. Ese otorgamiento se hizo el pasado 8 de julio, y no se tuvo en cuenta lo acordado, aseguraba.
Y responde Elvis Domínguez González, intendente municipal de Güira de Melena, que el de Teresa es «un caso reiterado con seguimiento en el territorio»: Se presentó en la Dirección Municipal de Vivienda en 2018, para realizar una solicitud de reparación de su casa. Fue atendida por la Jefa del Departamento de Desarrollo Habitacional y visitada por una técnica, para efectuar el levantamiento del deterioro de la vivienda. Y se propuso un monto de 39 900.00 pesos, radicado el 3 de marzo de 2018, para dicha reparación.
Añade que desde que Teresa realizó su solicitud del subsidio en diciembre de 2019 se iniciaron los trámites, según el procedimiento, para el otorgamiento de aquel: se realizó el levantamiento el 15 de febrero de 2020, y se hizo una nueva revaluación del caso. Se evaluó proponer un monto superior, 56 mil pesos, teniendo en cuenta el deterioro de la morada.
Terminado el proceso, dice, se trasladó el expediente a la Dirección de Trabajo y Seguridad Social para que los trabajadores sociales le realizaran la visita y le confeccionaran el modelo socioeconómico. Posteriormente el expediente regresó a la entidad.
«Y se presentó en julio de 2020, afirma, ante el Consejo de la Administración Municipal (CAM), donde quedó pendiente su aprobación para incluirlo en otra asignación, ya que en ese momento el monto no fue suficiente para todos los casos con solicitud y se priorizaron los más críticos. El expediente se mantuvo en espera de una nueva asignación de presupuesto para subsidio que solo fue recibida en el mes de diciembre.
«En el día de hoy, 23 de diciembre de 2020, se presentó el expediente ante el CAM, donde fue aprobado el subsidio por un monto de 56 000 pesos, y quedó la queja solucionada y conforme la promovente», concluye.
Agradezco la respuesta y el que al fin Teresa tenga aprobado el subsidio. Solo no queda muy claro la secuencia de las fechas entre una y otra versión del asunto, pues según Teresa, ella lo solicitaba desde 2017. Ojalá esta cubana con tantas vulnerabilidades pueda levantar de nuevo su techo.