Acuse de recibo
Hace más de dos años que el trabajador por cuenta propia Carlos Enrique Morales aguarda con suma paciencia porque el Consejo de la Administración Municipal (CAM) de Quivicán, en la provincia de Mayabeque, le pague los adeudos por un trabajo que le realizó a una de las dependencias de este.
Carlos Enrique, quien tiene una licencia en la actividad de Servicio de Construcción, reparación y mantenimiento de inmuebles, firmó, en noviembre de 2015, el contrato de ejecución de obra con la Unidad de Aseguramiento, Servicios a Educación, Cultura y Deportes, subordinada a dicho CAM.
Precisa que dicha obra, el Centro Cultural del Patio, sitio donde se desarrollan actividades campesinas, infantiles y para la juventud fue inaugurada el 29 de diciembre de 2015 y todavía a él no se le ha pagado el valor de lo ejecutado.
Refiere el remitente que el entonces presidente del CAM, Marrero Plasencia, durante todo 2016 planteó que se iba a ejecutar el pago. Y no se hizo. En enero de 2017 su sucesor en el cargo, Reinaldo O. Oliver Torres, reconoció la deuda, pero, según Carlos Enrique, planteó que él no tiene responsabilidad en ese pago. Dicha situación la conocen las máximas autoridades del municipio, pero Carlos Enrique sigue esperando por la retribución a su trabajo.
Para que los trabajadores por cuenta propia se inserten en la economía con disciplina, rigor y respeto, las instancias gubernamentales son las primeras que deben dar el ejemplo y cumplir con sus deberes para con ese sector, el cual, por cierto, aún no posee personalidad jurídica.
Siempre he sentido admiración por el afán comunicacional y humanismo de los radioaficionados cubanos, cuyas proezas en situaciones límite y catástrofes han brillado. Eso no deberíamos olvidarlo nunca en esta era de las profusas tecnologías de la información.
Roger A. Ballester Pérez (Edificio 10, apto. 31, Micro 2, Nuevitas, Camagüey) afirma que para operar estaciones de radioaficionados se precisa aprobar exámenes ministeriales que se convocan dos veces al año, y para los cuales hay que acreditarse en las oficinas provinciales del Ministerio de Comunicaciones (Mincom), según Resolución 75/2017 de este.
Apunta que según la Resolución, en la acreditación previa al examen, el interesado debe presentar el aval de conformidad del radioclub al que pertenece, carné de identidad o tarjeta de menor, certificación de nivel de escolaridad de noveno grado o superior, excepto los menores de 15, que requieren sexto grado, y certificación de antecedentes penales actualizada que acredite no haber sido sancionado por delito intencional, entre otros requisitos.
Aprobado el examen, el Mincom debe emitir un certificado de capacidad, el cual, ya en manos del radioaficionado, le autoriza, en el caso del nuevo ingreso, alcanzar la tercera categoría y efectuar trasmisiones radiales en los modos y frecuencia que la misma autoriza. A quienes aspiran a elevar su nivel, subir de categoría ampliando los modos operacionales, frecuencias y potencias para su uso, el trámite, ya efectuado el examen, ha sido históricamente de 30 y 35 días.
Cuenta Roger que de los colegas presentados a examen el 22 de julio de 2017, entre ellos 50 de su provincia, ninguno ha recibido aún el Certificado de Capacidad, a pesar de haber transcurrido más de seis meses.
Han hecho múltiples llamadas a la Dirección Territorial del Mincom en Camagüey, y allí les informan que solo tramitan los resultados de las pruebas, y esos documentos están en manos del Ministerio; que cuando lleguen a ellos los certificados les avisarán.
Los examinados siguen esperando. En la asamblea semestral del radioclub de Nuevitas, el pasado 3 de febrero, el Presidente de la Filial Provincial de la Federación de Radioaficionados de Cuba explicó que, según le habían informado, el Mincom había perdido la acreditación por parte del Ministerio de Educación para efectuar cursos y exámenes, y emitir certificos de aprobado, debido a cambios de estructura.
«¿Hasta cuándo deben esperar los radioaficionados cubanos para que se nos entreguen los certificados de capacidad, para los cuales cumplimos un grupo de requerimientos y pagamos lo establecido por ello?
«El 23 de diciembre de 2017 se hizo otra convocatoria a examen nacional, y esos compañeros también se sumarán a la incómoda espera burocrática. ¿A cuántos asciende la cifra de afectados?(...) Los radioaficionados nueviteros reiteramos la disposición de mantener las comunicaciones en cualquier circunstancia, como siempre lo hemos hecho al lado de la Patria y la Revolución, para salvaguarda del pueblo», concluye.