Acuse de recibo
No es la primera vez que se publican aquí quejas de técnicos y trabajadores del Deporte que han cumplido misiones de colaboración en el exterior, las cuales le reportan al país ingresos en divisas. Sin embargo, cuando retornan, se dilata sobremanera el pago bien merecido que ellos debían recibir con rapidez.
Yunieski Cabrera, vecino de Moisés Popa No. 5-A, en Charco Redondo, municipio granmense de Jiguaní, cumplió misión profesional en Venezuela de junio de 2009 a noviembre de 2011, como colaborador en la Misión Barrio Adentro Deportivo, en la República Bolivariana de Venezuela.
Al retornar a Cuba él hizo solicitud de sus beneficios por segunda vez, pues estando en el hermano país ya había firmado un documento para que su familia pudiera cobrar los emolumentos, lo cual nunca fue posible.
Ya Yunieski lleva más de cinco meses entre los suyos, y no se le ha dado respuesta alguna al respecto. Ha consultado con el Banco de Crédito y Comercio (Bandec) en su territorio, y no aparece en el sistema. Es algo así como inexistente.
Cada vez que se comunica con Cubadeportes en La Habana, le dicen que debe seguir esperando. «Recientemente —señala— la respuesta fue que los encargados del asunto estaban para Venezuela y retornaban el 13 de abril. En ocasiones, desconectan el teléfono o dan una respuesta no adecuada».
Por su parte, María Anicia Lara (Calle 2 No. 95, Manuel Tames, Guantánamo) refiere que su esposo se encuentra cumpliendo misión en Venezuela por Cubadeportes desde el 28 de mayo de 2010. Y ella recibió la llamada ayuda familiar por primera vez en mayo de 2011, por concepto de dos meses. Luego en junio de ese año, dos meses más, y en julio otros dos meses. Y a partir de ahí, quedó pendiente el pago desde agosto de 2011.
«En el municipio —afirma— nadie me da una explicación. En la provincia hice la reclamación en diciembre de 2011, y hasta el momento nadie responde. Por mis propios medios he hecho llamadas a Cubadeportes, y me dicen que espere. No hay respuesta de nada».
Desde la calle 40 No. 20, en Calixto, Majibacoa, provincia de Las Tunas, escribe Nidia Fernández Muñoz, madre de Ángel Luis Toirac Fernández, colaborador por Cubadeportes, que retornó de Venezuela con misión cumplida en marzo de 2011.
Refiere la señora que a Ángel Luis le depositaron parte de su dinero en Bandec, pero le falta el descuento del 40 por ciento del salario mensual que devengaba allá en la misión, para que lo recibiera aquí en Cuba.
El colaborador vio a la funcionaria que atiende Colaboración en el Inder municipal, y esta le orientó que se dirigiera a Colaboración a nivel provincial. Así lo hizo en dos ocasiones, y allí le dijeron que debía esperar, pues así había muchos en todo el país, con anterioridad a su caso, a los cuales todavía no les habían depositado el dinero.
Se dirigió también a Bandec en el municipio, y habló con la funcionaria que atiende colaboradores quien, con excelente trato y preocupación, le manifestó que la tarjeta existe pero no le han depositado el dinero.
Nidia reclama que se le brinde alguna información confiable al respecto, pues de acuerdo con el resultado de sus indagaciones «tal parece que ese dinero nadie sabe quién lo tiene que depositar».
Ella espera que los responsables de esta actividad en Cubadeportes puedan proporcionar una respuesta y eviten la ansiedad e incertidumbrede los afectados.
Si todos esos colaboradores cumplieron sin reparos y dignamente con el país y con pueblos hermanos, es inconcebible que se dilate tanto el pago de lo que ellos, con muchos sacrificios y alejados de sus familias, ganaron honrosamente.
No solo que no llega el dinero, sino que brillan por su ausencia las explicaciones e informaciones necesarias para ellos, sin los cuales Cubadeportes no sería nada. ¿Por qué es tan agónico el proceso de depositar el dinero?