La pinareña espera tener un año exitoso. Autor: Ricardo López Hevia Publicado: 13/01/2025 | 09:44 pm
Hace solo unas pocas jornadas la triplista cubana Leyanis Pérez arribó a su cumpleaños número 23. Aunque muy joven aún, su talento natural la ha llevado ya a las competiciones más encumbradas del deporte del campo y pista en el mundo, y sus prometedores saltos hacen que el futuro de la disciplina se rinda a sus pies.
Desde que irrumpió en la escena internacional dentro del atletismo hace par de años, esta pinareña ha ido ganando, poco a poco, la atención de los amantes del deporte rey. Y si no ha podido brillar a plenitud es porque desde el mismo inicio se topó con un muro bien alto, inexpugnable e invencible llamado Yulimar Rojas.
Sin embargo, durante 2024 el público de escenarios tradicionales para el atletismo como Bruselas, Mónaco o Estocolmo vieron a Leyanis suspenderse en el aire y estirarse hasta metas ambiciosas, solo reservadas para las triplistas «elegidas», cercanas a la barrera de los 15 metros.
De impecable técnica y con un puesto ganado en la élite del triple salto femenino, la cubana entrenada por Ricardo Ponce está llamada a ser el relevo de la sensacional extraclase Yulimar.
Incluso, ante la ausencia por lesión de la venezolana en París, Leyanis era, casi de forma unánime frente a los ojos del mundo, la aspirante principal del triple femenino al trono olímpico.
Pero en la Ciudad Luz la pinareña pagó la inexperiencia o, más bien, cargó en su espalda con el peso del favoritismo y las presiones externas. Eso se notó durante la final de la prueba, cuando las cámaras captaron su rostro rígido y tenso sobre el campo del Estadio de Francia.
«Los Juegos Olímpicos fueron un aprendizaje. Un quinto lugar no era lo que esperaba. Tengo las ganas y las energías para salir este año a concretar buenos resultados. París ya pasó, quedó atrás, ahora es borrón y cuenta nueva. Estoy convencida de que vendrán más Juegos Olímpicos y ahí estará Leyanis para dar lo máximo por Cuba», dijo ahora a Juventud Rebelde la espigada atleta.
Pero tan solo un mes después del insípido paso olímpico, la vueltabajera volvió a los saltos para ir a la revancha y agenciarse, por primera ocasión en su novel carrera, la Liga del Diamante. Fue el justo premio a la estabilidad competitiva durante 2024 de la atleta que, exceptuando los juegos bajo los cinco aros, estuvo ganándolo casi todo en la temporada.
«Estoy muy contenta por lo logrado hasta ahora, aunque contenta no significa conforme», comenta Leyanis. Ese resultado dentro de lo que más vale y brilla del triple femenino le valió para situarse entre los diez mejores atletas del país en 2024.
Para este año me he propuesto continuar en la élite, asegura. El objetivo principal en lo inmediato está enfocado en lograr un buen resultado en el campeonato mundial de pista cubierta, agrega.
En la ciudad china de Nankín, Leyanis aspira a mejorar la marca de 14.90 metros que la llevó al subcampeonato en el pasado bajo techo de Glasgow, en 2024. «Creo que con ese registro o superándolo puedo llegar al podio», expresó la pinareña.
Sin embargo, su mirada se extiende hasta el mes de septiembre, cuando se celebre el campeonato mundial de atletismo al aire libre en la capital japonesa, Tokio. «No existe otro pensamiento que el de ganar o situarme en el podio en ambos eventos», sentenció.