Carlos Martí se despidió ante su público. Autor: Tomada del perfil de Facebook de La Demajagua Publicado: 29/03/2023 | 11:17 pm
BAYAMO, Granma.—La 62da. Serie Nacional de Béisbol comenzó con tensión. En el «partido estrella» de la primera fecha los Alazanes de Granma dejaron al campo en la novena entrada a los Cocodrilos de Matanzas (3x2) para provocar la primera celebración de los aficionados asistentes al estadio Mártires de Barbados, quienes desafiaron una temperatura de ¡35 grados!
Bajo ese sol inclemente, impropio para jugar, los locales tuvieron el privilegio de presenciar un hecho grandioso: por primera vez en la historia cuatro mujeres impartieron justicia en un partido de series nacionales: Yanet Moreno (home), Miroslava Cumbá (primera), Yalilis Acosta (segunda) y Milagro Quiñones (tercera).
Los presentes en el duelo inaugural también pudieron ovacionar otra vez a Alfredo Despaigne, quien, tras diez años sin iniciar con los suyos, impulsó la primera carrera en el inning uno, anotada por el pimentoso Osvaldo Abreu.
La segunda anotación de los anfitriones llegaría en el tercer episodio, empujada por jit con las bases llenas de Carlos Benítez, situado como quinto en la tanda.
Granma desaprovechó varias oportunidades ante el abridor Renner Rivero, a quien le pegaron diez imparables, pero solo pudieron hacerle las dos carreras mencionadas.
Tal improductividad suele pasar factura en la pelota. Y eso es lo que estuvo a punto de ocurrir en el noveno rollo, cuando los matanceros empataron, ayudados por el descontrol de los relevistas Kelbis Rodríguez (dio una base, después de soportar un jit), Miguel Paradelo (sacó dos outs, pero aceptó un imparable dentro del cuadro y propinó un pelotazo) y Carlos Santana (regaló un boleto y ponchó a uno).
Las mayores emociones para los Alazanes llegaron en la parte baja de la novena: Darián Palma, quien se había ponchado
tres veces, estuvo a punto de sacarla del parque y su batazo contra Haykel Parra —perdedor a la postre— se convirtió en doblete. Luego, ante Noervys Entenza, Yulián Milán soltó cohete al jardín central, que llevó a tercera a Palma, quien inexplicablemente no anotó y acto seguido el emergente Pedro Almeida dio metrallazo a los jardines —el 14 de los granmenses— para sentenciar el choque.
Párrafo aparte merece César García, abridor de los locales y quien debe ser tenido en cuenta este año, en el que habrá Juegos Centroamericanos y del Caribe y Juegos Panamericanos. Lanzó seis entradas de manera impecable, con 81 lanzamientos y solo se le embasaron tres corredores (uno por base y dos por sencillo). A veces, como este miércoles 29, el béisbol es injusto: el hijo de Campechuela no pudo llevarse la victoria, que merecía más que cualquier otro lanzador. Al final, el triunfo fue a la cuenta de Carlos Santana.
El primer triunfo de los Alazanes estuvo antecedido por el retiro oficial de Carlos Martí Santos, timonel en 49
campeonatos cubanos, quien entró al estadio montado en un coche y recibiendo la ovación del público, que hubiera sido más numeroso si hubiese sido domingo.
Una gigantografía con su imagen fue develada antes de empezar el juego. «No estoy acostumbrado a tanta propaganda», dijo a JR, con la voz entrecortada, el tetracampeón con los Alazanes.
Ernesto Guevara Ramos, lanzador de la primera bola, también vio cómo destapaban una imagen suya en el estadio, el mismo donde propinó un cero jit, cero carreras a Industriales (8 de diciembre de 1992).
Esas emociones matizaron la primera fecha en el parque bayamés, en el que estuvieron Osvaldo Vento y Juan Reynaldo Pérez, presidente del Inder y comisionado nacional de béisbol, respectivamente, junto a autoridades políticas y gubernamentales de Granma.
Otras exaltaciones se vivieron en los restantes terrenos. Y de seguro vendrán más en un largo camino, que tendrá 75 juegos en la etapa clasificatoria y luego los deliciosos e «infartantes» play off.