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El fin de semana traerá consigo el regreso del atletismo cubano al ruedo competitivo y, además, el debut de varios de sus principales exponentes en la temporada al aire libre. El retorno a las pistas tendrá lugar durante la 19na. edición del Campeonato Iberoamericano, a efectuarse en la ciudad española de Alicante.
En tierras alicantinas la comitiva criolla tendrá como «puntas de lanza» al flamante campeón mundial bajo techo de triple salto Lázaro Martínez, al bronce olímpico de salto de longitud Maikel Massó y a la multimedallista universal y bajo los cinco aros en lanzamiento del disco Yaimé Pérez.
Ellos tres sobresalen en la nutrida lista de 40 atletas que defenderán los colores de la Isla entre los 453 competidores de 24 países anunciados para la lid española. De antemano, presentar casi medio centenar de aspirantes constituye la primera nota halagüeña, por tratarse de una oportunidad dorada para foguear al talento joven de cara a venideros certámenes de mayor relevancia.
No obstante, si algo resalta en el listado cubano con vistas al Iberoamericano es la ausencia, una vez más, del subcampeón olímpico de Tokio 2020 Juan Miguel Echevarría. Fuentes de la comisión nacional de atletismo esgrimen como justificación temas estratégicos en la ruta de preparación del camagüeyano de cara al mundial de la disciplina en Oregon el venidero mes de julio.
Echevarría no será el único que se perderá el torneo alicantino; tampoco estará la ochocentista Rose Mary Almansa. No obstante, en el caso de Juan Miguel llama doblemente la atención por tratarse de un deportista importantísimo para Cuba en el actual ciclo olímpico, serio aspirante a podio en París 2024, y que lleva demasiado tiempo alejado de torneos de primer nivel.
Tras la plata agridulce de Tokio, un período de pausa seguramente pudiera fungir como bálsamo para reactivar el talento y la ambición de Echevarría. ¿Pero nueve meses sin vivir el ambiente competitivo y evaluar de cerca a sus rivales son una estrategia sensata? Teniendo en cuenta que no está lesionado, la decisión invita al debate.
Por lo demás, será una buena ocasión para medir el estado actual del resto de los miembros de la delegación atlética criolla, unos de cara al citado certamen estival de Oregon y otros ante retos de menos entidad y también de cara al futuro.
