Los matanceros terminaron agotados, pero felices Autor: Facebook Publicado: 22/05/2019 | 10:03 pm
Ni Osvaldo Rojas Garay, el gurú de los numeritos, ha podido concluir una investigación sobre todos los probables récords o hechos curiosos producidos en el juego Villa Clara-Matanzas del pasado martes en la serie sub-23. Es mucha la hoja de anotación que tendrá que revisar, porque el asunto no está solo en las 20 carreras que anotaron los Cocodrilos en el tercer inning.
De hecho, ni en series nacionales se había pisado tantas veces el home plate en una entrada. La marca, confirmada por Rojas Garay, y si él lo dice, póngale el cuño, eran las 18 carreras que le hizo Las Tunas a Guantánamo el 19 de abril de 2009.
Internacionalmente, Cuba sí se había cansado una vez de darle la vuelta al cuadro en un episodio, cuando en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1978 subió 24 anotaciones a la pizarra, y aquello fue a aluminio limpio.
Pero en el choque de antier, hubo varias secuencias curiosas. Por ejemplo, cinco boletos seguidos, tres dobletes después, cuatro bases por bolas más consecutivas y dos dobles más a la hila. Si cambiamos el enfoque, seis bateadores hicieron lo mismo las dos veces que empuñaron en ese episodio: cuatro de ellos se embasaron siempre por boleto y dos por tubeyes, y otros dos jugadores, primero y noveno en el line up optaron por una acción de cada tipo, una base por bolas y un batazo de dos esquinas.
¡Qué jueguito! Al menos ahí tiene Osvaldo material de estudio para su próxima edición del libro Casos y Cosas de la pelota.
Las Tunas refuerza el bullpen
Y seguimos con reportes de la preparación rumbo a la 59na. Serie Nacional. Desde Las Tunas dice el colega Orlando Cruz que, además del retorno de Carlos Juan Viera, se sumó al entrenamiento el camagüeyano Yormani Socarrás.
Sin embargo, es probable que no puedan contar con el diestro Alejandro Meneses, quien se restablece de una in-tervención quirúrgica, aunque su nombre figura en la preselección.
En la próxima temporada parece que habrá unos cuantos «mudados» de provincia. Siempre que sea para jugar, que no se cierren las puertas.