Sancti Spíritus y Villa Clara prometen un duelo bien reñido, aunque la mayoría apuesta por la tropa de Eduardo Paret. Autor: Oscar Alfonso Sosa Publicado: 04/01/2019 | 09:05 pm
Cuando menos parecía que los Gallos espirituanos iban a cantar tan alto, José Raúl Delgado le dio la espalda a los pronósticos y ni en las últimas jornadas, cuando el equipo estuvo cerca de ser rebasado por Industriales, perdió la esperanza de devolverle a su afición el privilegio de ver a sus muchachos en la postemporada.
Su barrida ante unos Leñadores sin hachas los catapultó hasta el segundo lugar y desde ayer andan fajados con sus vecinos de Villa Clara por el pase a la final, en un play off que comenzó con la despedida oficial a uno de los receptores más ofensivos de la pelota cubana, Eriel Sánchez, un hombre que le pegaba con odio a la pelota y donde picaba dicen que demoraba un siglo en desaparecer la huella, y jugó siempre con la disposición de los Azucareros y Las Villas de antaño en la región central del país.
Casi todos los vaticinios se inclinan por el conjunto de Eduardo Paret, pues lucen un staff de mejores números, único por debajo de cuatro carreras limpias por juego (3.70) y 1.46 de WHIP, y además tienen más experiencia en postemporada.
Con Alaín Sánchez (9-3), Freddy Asiel (7-7, y en busca de su victoria cien), Yosvani Torres (no jugó la segunda fase por lesión) y Misael Villa (2-2) como abridores, los herederos de los míticos Leopardos de Santa Clara disponen de un bullpen joven, pero con credenciales: Pablo Luis Guillén (7-3 y un partido salvado), Javier Mirabal (4-7-5), Ronny Valdés (4-1-6), Daniel Conde (1-1) y el recién incorporado Wilson Paredes (10-5-7).
Lo que más débil tuvo el equipo durante la primera etapa del campeonato, el bateo, fue reforzado luego con César Prieto, Carlos Benítez y William Saavedra, a tal punto que de los cuatro semifinalistas resultan el conjunto de más Poder Aislado (SLU-AVE): 115.
Dicho en palabras menos técnicas: aumentó su producción de extrabases y lo hará mucho más ahora con la llegada a su alienación del líder en jonrones de la serie, Stayler Hernández (19). En el béisbol moderno se busca la mayor eficiencia posible a la ofensiva, pues cada vez menos se ligan tres hits para fabricar una carrera.
Pese a que su poder aumentó, el Villa Clara es el elenco que menos impulsa corredores en posición anotadora (23 por ciento) y también resulta el de más bajo average (.278) y OBP (.359), lo que pudiera mejorar con la ayuda de Yunior Paumier, muy hábil en el cajón de bateo.
Es un lujo para Paret disponer de dos líderes muy cotizados en la pelota: el de vuelacercas y el de carreras remolcadas (Yurién Vizcaíno, con 88), entre ambos sonaron 31 palazos de vuelta completa.
Han armado un elenco competitivo, que combina experiencia (Yeniet Pérez, Yulexis La Rosa, Saavedra, Benítez, Stayler, Paumier) con talentosos jóvenes como Norel González, César Prieto…
Con espuelas afiladas
Sabe José Raúl Delgado que la pelea aunque empiece en su valla será dura, pero confía en sus muchachos, quienes tienen en Frederich Cepeda a una inspiración que hará lo humano y lo divino por regalarse una corona con el traje espirituano.
Autor de 15 bambinazos y una línea ofensiva de .340/.513/.660, resulta, sin dudas, la mayor preocupación para los pitchers rivales, y junto a él estarán en la alineación Yunier Mendoza (.353/.397/.435), Dayán García (.309/.335/.378), Sergio Barthelemy (.333/.426/.437) y el hombre hit de la temporada, Orlando Acebey (.373/.415/.469), quien ligó 139 incogibles para encabezar ese acápite en la serie e imponer un récord para espirituanos.
Colectivamente, los Gallos son los que menos Poder Aislado exhibieron (88) con apenas 46 jonrones, uno cada 66.8 veces al bate, y entre los cuatro sobrevivientes, es el equipo que más roletazos conecta por cada fly out (1.83), aunque lograron fletar 24.7 por ciento de los corredores que llegaron a segunda y tercera bases, solo superados en ese renglón por Las Tunas.
Sus lanzadores trabajaron para 4.08 de efectividad y 1.50 de WHIP, con la mejor frecuencia de ponches por cada nueve innings (5.74) de los clasificados, y ahora se blindaron con el derecho Frank Luis Medina (5-3 con Industriales), y líder en efectividad de la campaña con 2.76, quien asumirá un rol protagónico en la rotación espirituana junto a Yariel Rodríguez (5-4), máximo ponchador (118); Yoen Socarrás (8-8), Alberto Bicet (2-3 con los Gallos) y los cerradores Yanieski Duardo (2-3 y 10 salvados) y el mejor taponero histórico de la pelota cubana, José Ángel García (3-4-7 bajo el mando de José Raúl) y puntero en salvados en toda la temporada (12).
La defensa mejorará ostensiblemente con Yordan Manduley, uno de los mejores paracortos de la actualidad, y aunque Oscar Valdés fue una adquisición obligada por la enfermedad de Yunior Ibarra, el muchacho lució inmenso con los Azules de la capital, a tal punto que dejó en el banco a Frank Camilo Morejón.
Como este tipo de análisis periodístico queda insípido sin un aventurero pronóstico, aquí va el mío: Villa Clara, pero lo digo bajito, porque estos Gallos son de pelea.