Julio Pablo Martínez consolidó la barrida de los Indios. Autor: Periódico Venceremos Publicado: 21/09/2017 | 06:17 pm
El lanzador holguinero Ernesto Hernández iba este martes camino a completar un hecho poco acostumbrado en series nacionales. Había lanzado ocho innings a los Indios guantanameros y no había permitido un solo imparable. El duelo marchaba empatado a una carrera y estaba latente la posibilidad de apuntarse un triunfo en tales circunstancias.
Pero apareció Julio Pablo Martínez, y con un cuadrangular en la parte baja del noveno episodio sepultó la posibilidad. El serpentinero local cubrió la ruta completa, pero el único hit guantanamero fue suficiente para completar la barrida, siempre imponiéndose con la mínima diferencia.
Hasta el momento del estacazo mortal, los anfitriones habían aprovechado los errores del camarero Yeison Pacheco y el inicialista Michel Gorguet —ambos en la misma jugada— para equilibrar la balanza en el séptimo acto. Curiosamente, los holguineros habían tomado ventaja un inning antes gracias a otro cuadrangular solitario, este salido del bate de Jorge Luis Peña.
Otras veces un equipo se ha apuntado el triunfo conectando únicamente un hit, pero solo una vez sin hacerlo. Según los archivos de nuestro estadístico Benigno Daquinta, sucedió el 16 de marzo de 1968, cuando Camagüey derrotó a Granjeros por 1-0, durante la séptima edición del torneo. Entonces, los avileños Elpidio Jiménez y Julio Blanco silenciaron por completo a la artillería rival, pero no pudieron impedir el triunfo de Florentino Alfonso sobre el diamante del Cándido González agramontino.
Otro elenco que bajo el sol aseguró su enfrentamiento particular fue el de Sancti Spíritus, que con un racimo de cinco anotaciones en el octavo acto aseguró otro éxito frente a la tropa de Pinar del Río. A punto estuvo de pasar la escoba por las orillas del Yayabo, pues en el otro juego celebrado en la jornada —un día antes habían suspendido por lluvias— los vueltabajeros resistieron una rebelión de última hora para apuntarse su primer éxito en el torneo, este por una nariz.
También hubo recuperación en la sabana agramontina, donde los Toros habían sellado el martes su enfrentamiento con los Leñadores tuneros. Las acciones se retomaron a partir del segundo inning, y a la altura del octavo los locales ya habían hecho lo suficiente para noquear a sus rivales.
Asimismo, más notas llamativas del programa vespertino tuvieron como escenario el 5 de Septiembre cienfueguero, donde los Elefantes tuvieron una reacción inesperada. Iban perdiendo por ocho cuando en su penúltima vez al bate «patearon» a su antojo al cuerpo de relevistas matanceros hasta pisar el home ¡nueve veces!, y cambiar a su favor la historia.
Seguimos soñando
Las esperanzas de coronación permanecieron intactas para la selección cubana, pues con el ajustado triunfo sobre Taipéi de China en la última jornada clasificatoria, avanzaron a la segunda ronda del Campeonato Mundial de béisbol, categoría sub-18, que se celebra en la ciudad japonesa de Osaka.
Lo dirigidos por Luis Cuba tomaron ventaja de dos carreras en el tercer inning, ambas impulsadas por Luis Robert Moirán con un doblete. El jardinero avileño y el lanzador Lázaro Najarro fueron los principales puntales de la victoria. El primero tuvo velada perfecta en cuatro turnos, sumó otro doblete y empujó todas las carreras del equipo. El otro lanzó ocho entradas sin permitir carreras, aunque en el noveno le flaquearon las fuerzas.
El episodio lo abrieron los asiáticos con par de hits, y después de un pelotazo, el receptor Kao pegó doble impulsor de un compañero. Vino entonces al rescate Yandy Molina, quien sacó los dos restantes outs, uno de ellos el fly de sacrificio de Chiang que empujó la segunda carrera de los perdedores.
Así, la novena cubana cerró su paso por el grupo B con balance de cuatro triunfos y un revés, por detrás de los muchachos de Corea del Sur que terminaron invictos después de someter por 11-3 a Italia. También avanzó por esa llave la representación de Canadá.
Por el otro lado sobrevivieron al primer corte los también imbatibles anfitriones, los estadounidenses y los australianos.
A la nueva Súper Ronda se arrastran los resultados obtenidos frente a los equipos clasificados, por lo que Japón y Corea del Sur parten con un acumulado de 2-0, Cuba y Estados Unidos con 1-1, y Australia y Canadá con 0-2.
Esa fase comenzará mañana con los cruces Corea del Sur-Estados Unidos, Cuba-Australia y Japón-Canadá. En los días siguientes los cubanitos enfrentarán por orden a Estados Unidos y Japón, con el objetivo de convertirse en finalistas del torneo.